En el segmento de los camiones, mejorar la productividad durante los traslados de carga es uno de los principales objetivos a lograr. La dupla camión-conductor es crucial para poder conseguirlo. A partir del lanzamiento de la nueva línea camiones que Volvo presentó a fines del año pasado, se implementaron soluciones inéditas para aliviar la tarea del transportista y a su vez incrementar la productividad de los camiones. A continuación, los aliados tecnológicos que ayudan a que los camiones Volvo sean los más eficientes del mercado.
Leyendo el camino
El innovador sistema I-See emplea un mecanismo de reconocimiento automático de la topografía de la ruta, que funciona de manera conjunta con la caja de cambio I-Shift. Entre ambas, optimizan la velocidad y el pase de marchas, todo con el fin de mejorar el consumo de combustible.
Subir sin esfuerzo
El I-See también reconoce el grado de la cuesta arriba e incrementa la velocidad con el fin de llegar a la cima de manera suave y sin esfuerzo. Todo eso aporta a la finalidad de ahorrar combustible.
Descender y ahorrar
En el caso de que el camión viaje cuesta abajo, el I-See activa un sistema que se denomina Eco-Roll. Este desactiva la transmisión y permite que el camión continúe la marcha durante un lapso antes de reactivar nuevamente la caja. Asimismo, puede aplicar el freno motor. Con eso se busca minimizar la necesidad de utilizar el sistema de frenos, lo que ahorra energía.
Menor tara, mayor autonomía
Los camiones Volvo se caracterizan por contar con un entre ejes reducido. Esto les permite utilizar semi remolques más largos y una mejor distribución de la carga entre todos los ejes.
"La tara reducida logra maximizar la carga a transportar durante toda la vida del vehículo y amplía la capacidad de tanques de combustible y ADBlue; todo eso contribuye a mermar el consumo de combustible y a maximizar la autonomía, al tiempo que se reducen los tiempos de paradas", explicó Federico Reser, gerente de producto de Volvo en Argentina.
Más liviano, más ahorro
Por último, es válido mencionar el cambio de motorización de 13 a 11 litros, lo que se tradujo en una merma de la planta motor de 150 kilos respecto a la generación anterior. En síntesis, los camiones de Volvo son más livianos y por ende consumen menos.
“Los transportistas van a poder cargar más o gastar menos en la cisterna que necesitan adquirir", concluye Federico Reser, gerente de producto de Volvo en Argentina.
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