En marzo de 2025, el Índice Construya (IC) que mide la evolución de los volúmenes vendidos al sector privado de los productos para la construcción que fabrican las empresas que lo conforman registró una recuperación de 8,23% mensual desestacionalizada. Asimismo, en la comparación interanual el IC registró una suba de 15,8%, producto de la bajísima base de comparación que estableció marzo de 2024, mes en el cual los despachos de insumos habían caído al mínimo de los últimos 5 años en el marco de un proceso de adaptación de la cadena de valor al nuevo escenario económico luego del cambio de gobierno en diciembre de 2023.
En el mismo sentido, el IC cerró el primer trimestre de 2025 en un nivel 6% superior al registrado en el mismo período del año anterior.
“En los últimos 2 meses asistimos a una recuperación gradual de las entregas de materiales para la construcción, luego de 6 meses de una importante retracción. En tanto, hacia adelante la sostenibilidad de este proceso dependerá en gran parte del nivel de incertidumbre que exista, lo cual está vinculado con factores externos e internos”,
explicaron desde Construya.
Ese índice mide la evolución de los volúmenes vendidos al sector privado de los productos para la construcción que fabrican las empresas líderes que conforman el Grupo Construya: ladrillos cerámicos, cemento portland, cal, aceros largos, carpintería de aluminio, adhesivos y pastinas, pinturas impermeabilizantes, sanitarios, calderas y sistemas hogareños y centrales de calefacción, grifería y sistemas para conducción de agua y gas, pisos, revestimientos cerámicos y materiales eléctricos y electrónicos. Integran la asociación Aluar-División Elaborados, Grupo Dema, LaterCer SA-Cerámica Quilmes SA y Plavicon, entre otras firmas.
Por otro lado, el costo de la construcción en el país aumentó en marzo 0,3% mensual y 49,3% interanual, con lo que se ubicó bastante por debajo de la inflación general (3,7% mensual y 55,9% interanual). El incremento mensual fue resultado de subas en materiales (0,6%) y gastos generales (0,8%), junto con una baja de mano de obra (0,1%). Entre los materiales se destacaron las subas de pisos de alfombra (2,7%), vidrios (2,5%) y griferías y llaves de paso (2,4%). En tanto, los menores incrementos se dieron en electrobombas (1,8%); cemento, cal y yeso (1,3%), y productos aislantes (1,2%).
Cabe destacar que el aumento en los precios de la construcción en Córdoba para el mismo lapso fue mayor: 0,9% mensual y 49,9% interanual. De esta manera, el costo del metro cuadrado de construcción para una vivienda social de 50,25 metros cuadrados llegó a $ 705.868,4.

Contexto general
Al mismo tiempo que se dieron a conocer esas estadísticas, la flexibilización de las importaciones de materiales se instaló con fuerza en la agenda sectorial. Con la posibilidad de acceder a insumos a costos más competitivos y mejorar la planificación de obras, los desarrolladores ven en este contexto una oportunidad clave para recomponer la rentabilidad y dinamizar el sector, si bien persisten desafíos estructurales como la carga impositiva y la falta de financiamiento.
El aumento de los costos en dólares fue un factor determinante en la caída de la rentabilidad de los proyectos inmobiliarios.
“El costo de construcción por metro cuadrado alcanzó los US$ 1.500, mientras que el precio de venta en pozo no acompañó esa suba”, señaló Mali Vázquez, directora ejecutiva de la Cámara Empresaria de Desarrolladores Urbanos (Cedu). Además, la directiva destacó que la carga impositiva, la inflación, el tipo de cambio y la falta de acceso a financiamiento inciden en la suba de los costos.
En la misma línea, Flavio Galli, director ejecutivo (CEO) de Grupo Tueroc advirtió: “El incremento de costos no sólo afecta a los desarrolladores, sino también a compradores e inquilinos”.
Según su análisis, la tendencia de los últimos meses llevó a trasladar estos costos a los consumidores, lo que encarece tanto las viviendas nuevas como las usadas.
Por su parte, Santiago Egurza, director de Barza Real Estate, explicó: “El costo de obra está creciendo a un ritmo más acelerado que el precio de venta, lo que reduce los márgenes de ganancia y desafía la viabilidad de nuevos proyectos”.
Frente a este panorama, esa empresa optó por limitar las ventas hasta que el mercado recomponga valores y permita operar con mayor previsibilidad.

Perspectivas
La posibilidad de acceder a materiales importados es vista por los desarrolladores como una herramienta clave para mitigar costos. “Medidas como la apertura de importaciones, el fin del cepo y la baja de tasas marcan el inicio de una nueva etapa para el desarrollo inmobiliario en Argentina”, afirmó Vázquez. Incluso, desde la Cedu están impulsando un viaje exploratorio a China para conocer de cerca modelos de construcción industrializada a gran escala y evaluar su implementación en nuestro país.
Por su parte, Galli confirmó que la importación de materiales ya comenzó a generar cambios en el sector. “Desde el último trimestre del año pasado hemos notado un impacto significativo en los costos de materiales de terminación, no sólo en precio sino también en calidad”, explicó. Sin embargo, advirtió que hay que ser cautelosos con la selección de productos importados, ya que algunos pueden generar inconvenientes en el servicio de posventa.
Finalmente, Gabriel Pascual, presidente de Ferias y Exposiciones de la Construcción Argentina (EFCA) y uno de los organizadores de Batev (la Exposición Internacional de la Construcción y la Vivienda que se desarrollará del 25 al 28 de junio de 2025 en La Rural de Buenos Aires), concluyó: “La apertura a la importación de materiales de construcción es una medida que el sector sigue con interés. Desde Batev entendemos que ampliar la oferta puede contribuir a mejorar la previsibilidad, agilizar obras y ofrecer nuevas alternativas en un mercado en constante evolución. Al mismo tiempo, destacamos el compromiso y la calidad de la industria nacional, que históricamente ha sostenido al sector con innovación, inversión y empleo. En un contexto donde se valoran la eficiencia y la competitividad, es clave avanzar con una mirada integradora que fortalezca toda la cadena productiva”.

¿Arranca o no?
La construcción rebotó 3,7% anual en febrero pasado, en lo que es la primera suba en la era Milei. En febrero, el ISAC (índice de referencia de la actividad) trepó respecto a igual mes de 2024, con lo cual el acumulado del primer bimestre de 2025 registró una suba del 1,1% respecto a igual período de 2024, según informó el pasado miércoles 9 de abril el Instituto Nacional de Estadística y Censos (Indec). En febrero, el consumo comparado con el año anterior presentó subas de 82,2% en asfalto, 28,1% en placas de yeso, 24,8% en pisos y revestimientos cerámicos, 13,1% en hormigón elaborado, 8,6% en artículos sanitarios de cerámica, 7,5% en cemento portland, 6,8% en yeso, 6,4% en ladrillos huecos, 4,4% en hierro redondo y aceros para la construcción, 4,3% en pinturas para construcción y 0,9% en cales. En tanto, hubo bajas de 20,8% en mosaicos graníticos y calcáreos y 12,1% en los demás insumos (incluyen grifería, tubos de acero sin costura y vidrio para construcción). Sin embargo, el ISAC se ubicó en 145, mientras que antes del cambio de gobierno era de 190.