La arquitectura y el Real Estate viven una transformación silenciosa: hoy, ya no alcanza con que un edificio sea eficiente en consumo energético o atractivo en términos de diseño. Ahora, los ocupantes buscan que los espacios garanticen salud, confort y bienestar integral. En ese contexto, la certificación WELL se consolida como la nueva referencia global para lograrlo. A diferencia de otras normas, WELL pone a las personas en el centro. Evalúa 10 áreas clave: aire, agua, nutrición, luz, movimiento, confort térmico, sonido, materiales, mente y comunidad. Cada decisión de diseño (desde la elección de un sistema de ventilación hasta la calidad acústica de una sala de reuniones) impacta de manera directa en la experiencia del usuario.
Los beneficios son concretos: estudios recientes muestran que los edificios certificados WELL logran una mayor satisfacción de ocupantes (28%), reducción del ausentismo y mejoras en el desempeño cognitivo. Asimismo, a nivel de mercado, los proyectos con esa certificación alcanzan primas de alquiler del 4% al 7% y atraen más rápido a inquilinos de alto perfil.
En Argentina, varios desarrollistas evalúan o comienzan a incorporar WELL en sus proyectos, impulsados por la demanda pospandemia de oficinas, viviendas y espacios mixtos que garanticen entornos más saludables.
La arquitectura como experiencia humana
“Hoy, la innovación en real estate pasa por la experiencia humana. WELL ofrece un lenguaje común que integra diseño, ciencia y negocio, y permite a arquitectos y desarrollistas diferenciarse en un mercado cada vez más competitivo”, dijo Micaela Smulevich, directora y cofundadora de Green Group Sustainability.
De esta manera, la certificación WELL se consolida como el estándar que guía a la arquitectura hacia un futuro en el que los edificios no sólo sean sustentables, sino también lugares que cuidan, inspiran y potencian a quienes los habitan.
Bienestar que se construye
Un ejemplo reciente de esta tendencia lo aporta Grupo Edisur, que logró la certificación WELL Platinum para su edificio corporativo ubicado en Manantiales I, en la ciudad de Córdoba. Ese proyecto se posiciona entre los más destacados de América Latina y fue desarrollado junto a Green Group Sustainability, tras más de un año y medio de trabajo.
El edificio redefine la manera de trabajar y habitar los espacios corporativos. Con 14 salas de reunión, terrazas verdes, mobiliario ergonómico, iluminación natural en el 90% de las áreas y políticas de alimentación saludable, promueve la productividad, la conexión humana y el bienestar integral. También se distingue por su eficiencia ambiental: recupera 500 litros diarios de aguas grises para riego, cuenta con doble vidriado hermético (DVH), sistemas de climatización sectorizados y programas de reciclaje.
Algunas cifras de impacto:
• 85% de satisfacción térmica gracias a sistemas de climatización sectorizados.
• 500 kg de residuos reciclados en el último año, equivalentes a más de 10 mil botellas plásticas.
• dos terrazas verdes, más de 2.400 metros cuadrados de césped exterior y 300 plantas interiores que integran naturaleza y arquitectura.
• Capacitaciones y programas de salud mental y seguridad vial, en alianza con instituciones de prestigio como el Hospital Privado. Con esa certificación, Grupo Edisur se suma a un grupo selecto de edificios corporativos WELL Platinum en Argentina (junto a Globant Tower, Sanofi Martínez y Citibank) consolidando un nuevo estándar de bienestar corporativo en el país.
“En arquitectura, la certificación WELL abre un nuevo paradigma: diseñar no sólo para la eficiencia del edificio, sino para la salud de quienes lo habitan. Es un salto de calidad, que cambia la forma en que concebimos los espacios”, concluyó Sohrab Yazdani, director y fundador de Green Group Sustainability, consultora especializada en servicios integrales de sustentabilidad.
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