En la victoria de Instituto sobre Argentino de Junín (101-73), por una nueva fecha de la Liga Nacional de Básquet, Luciano Guerra jugó 21m07s y firmó una planilla con siete puntos, seis rebotes y cuatro asistencias. El encuentro jugado el viernes en el Ángel Sandrín fue el estreno del base cordobés con la casaca albirroja. “Estoy muy contento porque es un debut con victoria, una abultada victoria. El equipo funcionó bien, me sentí cómodo en la cancha con los chicos, así que realmente muy contento”, describió a La Voz una vez finalizado el cotejo.
“Lucho” se formó en Barrio Parque y pegó el salto a la LNB en Comunicaciones de Mercedes, equipo con el que debutó en la máxima categoría el 10 de noviembre de 2019 frente a Atenas. Cinco años después, a finales de otro noviembre, el jugador nacido en Colonia Caroya, tuvo la oportunidad de jugar en Córdoba, vistiendo los colores de un elenco cordobés protagonista en la Liga Nacional, y con sus afectos en la tribuna. “Había varios (de la familia) y amigos también. Eso hacía mucho que no pasaba y estoy muy contento de verlos ahí”, confesó sobre la presencia de familiares y amigos en el Sandrín.
En la cancha, Guerra se movió como si llevara tiempo jugando en el equipo y se notó la comodidad de la que habló anteriormente. “A los chicos los conozco porque los he enfrentado siempre; siempre estuve de la vereda de enfrente y sé las características de cada uno. Con la confianza que me dan ellos y en un equipo que tiene una estructura tan fija y que ya prácticamente funciona sola, es fácil incorporarse. Tengo que sumar desde mi rol en lo que necesite el equipo”, explicó el jugador que viene de actuar en El Calor de Cancún, de la Liga de México.
El cordobés de 1,84 metros será el reemplazante natural del capitán Leandro Vildoza, que en el último partido de la Gloria los casi 19 minutos en cancha le bastaron para ser el MVP del juego con 22 de valoración. “Me toca el rol de venir del banco y lo asumo con total naturalidad; tenemos jugadores de un nivel altísimo y creo que eso es lo que me va a hacer crecer. Estar todos los días entrenando con ellos y poder sumar me va a hacer ir creciendo día a día. Estoy muy contento de poder formar parte de este equipo, poder responder a ellos y aprender, tanto de Lucas (Victoriano) como de mis compañeros. Es muy lindo poder estar en Instituto”, expresó “Lucho” y aseguró que le puede aportar la energía que maneja el equipo.
La energía es la cualidad que tiene este equipo y no tiene que bajar cuando yo esté en cancha. Por ahí lo ven a ‘Lea’ (Vildoza) que está corriendo para todos lados y no para; es necesario darlo esos minutos de descanso y para eso estaré en cancha, haciendo que el equipo no baje la energía. Intentaré estar a la altura de lo que Instituto se merece”, cerró Luciano Guerra, un jugador en el que Lucas Victoriano confía en que puede pasar bien la pelota, leer el juego y darle mucho a su equipo.