Instituto no tuvo una buena noche en el Sandrín. Chocó una y otra vez con la muralla defensiva armada por Oberá Tenis de Misiones, pero nunca renunció a la lucha. Peleó para mantener fuerte su casa. Y se sabe, la Gloria tiene un bunker en el Sandrín y mantuvo el invicto.
Le ganó a un durísimo equipo misionero por 70 a 68, viniendo de atrás. A 1′30 del final, el elenco de Diego Vadell perdió por 7 (60-67), pero nunca se entregó. Y pese a que no jugó bien, que pocas veces pudo imponer su ritmo, se quedó con una valiosa victoria, esas que valen doble.
En un encuentro en que no le entraron los triples (25 por ciento), Instituto salió ganador. El equipo de Alta Córdoba sigue con récord positivo, con siete ganados y dos derrotas. El sábado, las 11.30 recibirá en el Sandrín a La Unión de Formosa para seguir en ganador.
Oberá se va fortalecido de Córdoba tras ganar dos de los tres encuentros con gran rendimiento.
Nicolás Copello fue el mejor de la Gloria con 22 puntos, más 3 rebotes y 3 asistencias. Y apareció en el final, cuando más lo necesitaba el equipo, Keylan Boone para aportar 14 tantos más 7 recobres.
El partido de Instituto
Con mucho ritmo y alto goleo empezó el partido en el Sandrín. Instituto, fino en los triples y en el movimiento de la pelota, se adelantó 10-4 en tres minutos. Oberá, duro y trabajado, respondió con el goleo de Santiago Barrales. El alero, que en los otros dos partidos en Córdoba (ante Atenas e Independiente de Oliva) se destacó con su férrea defensa, anotó los primeros 12 puntos de su equipo.
El primer cuarto fue parejo, tanto, que terminaron igualados en 21.
Le costó anotar a la Gloria en el segundo capítulo. Le costó tener tomar tiros cómodos además, por la gran defensa de los misioneros, que ante las falencias para convertir del local, pudo correr, y ponerse adelante 30-25 en 4 minutos.
Oberá es durísimo atrás, leal, pero entrega todo. Te lleva, con sus movimientos, a jugar cerca del aro y ahí, atrapa. Y tiene armas variadas en el ataque. Por eso, mantuvo el liderazgo (37-34).
Instituto que es un equipo valiente, luchó con el poderío físico de los misioneros. Pero fue más Oberá en la primera mitad y se quedó con el mando 34-40.
El conjunto visitante no le aflojó al esfuerzo pese a ser el tercer partido de la gira. Juega, defiende y cuándo tiene que bajar la mano, no duda. Amplió la 9 la diferencia abriendo el tercer cuarto (43-34), ganando mucho por la línea de fondo (puerta de atrás).
Instituto, sin efectividad en triples, no tuvo una de sus armas más valiosas, justo ante un rival que se cierra y cuida mucho la pintura, debió esforzarse, multiplicarse. A veces, se apuró.
Empezó a ganarle la impaciencia a la Gloria ante un Oberá al que le sobra paciencia y tranquilidad para jugar. El elenco de Vadell cae 45-54.
Alargó a 14 la diferencia Oberá: 59-45 en 1′30 del cuarto episodio, y respondió Instituto. Su puso fuerte en defensa, peleando también. Y le entraron dos triples seguidos, primero de Copello y después de las manos de Boone, para achicar 53-59. Llegó a ponerse a tres el Albirrojo: 57-60 con dos libres de Boone.
Pero Oberá respondió con un 5-0 para tomar aire: 65-57 y 2′42 por jugar. Y parecía que se lo llevaba. Que ganaba los tres partidos en Córdoba. No. Instituto se puso firme en casa. Copello fue el dueño de las ofensivas gloriosas, acompañado por Boone, para darlo vuelta 69-67 con 15 segundos en el reloj.
Vorhees fue a la línea y metió uno. Y cerrando la noche, Monacchi también tuvo tiros libres y convirtió uno para asegurar la victoria en casa.

























