Martín González sonríe cuando se le pregunta si en Independiente ya le dieron un juego de llaves, en relación a los 10 años que lleva en forma ininterrumpida como entrenador del club de Oliva y que esta semana se confirmó que sumará la temporada número 11. En más de un cuarto de su vida de sus actuales 42 años que Martín transita su tiempo y vuelca su energía dentro de la institución que le dio la posibilidad de dirigir el plantel de mayores a pocos meses de arribar para hacerse cargo de la categoría U 19.
En esos 10 años el hermano menor Sebastián, también director técnico (actualmente en Riachuelo de La Rioja), transitó todas las categorías en las que Independiente compitió. Desde los torneos de la Asociación de Oliva, pasando por la Liga Cordobesa, el Torneo Federal, la Liga Argentina y la actual Liga Nacional, donde consiguió el ascenso en la temporada 2022/2023.
Con Independiente, por entonces “benjamín” de la Liga, afrontó dicha competencia con un plantel integrado mayoritariamente por el utilizado en Liga Argentina, pero que no fue obstáculo para consolidar el equipo en la élite nacional varias fechas antes del final de la fase regular sino que además quedó a dos puestos de clasificar a playoffs (fue 14º), un objetivo al que apuntan y miran con deseo para la temporada 2023/2024.
A tono con los profesionales que cuando pueden “se asoman” a otros eventos que les permita incorporar algo más a su repertorio y aprovechando que los trabajos de pretemporada recién asoman en agosto, González concurrió a la Bombonerita a ver el cuarto punto de la final entre Quimsa y Boca de la Liga Nacional. Y también para ver a Bochas Sport de Colonia Caroya, quien ante Racing se jugaba por seguir en carrera en la Liga Federal.
Desde la Ciudad de Buenos Aires, donde además aprovechó para realizar trámites personales, el entrenador se dio una pausa para conversar con Mundo D acerca de su continuidad en Independiente de Oliva y los objetivos a encarar en su segunda participación en la Liga Nacional.
-¿Cuáles fueron los motivos que te llevaron a afrontar una nueva temporada en Independiente?
-Principalmente por el vínculo que existe. Por todo un camino que hicimos juntos y donde creo que todavía hay cosas por mejorar y nuevos desafíos para encarar. También porque hay expectativas nuevas. Sabemos que en la primera temporada cumplimos los objetivos y que la segunda será más dura porque al principio no nos conocían y ahora sí, saben la forma en que jugamos y todo. Pero es un nuevo desafío el terminar de hacer bien la nueva categoría. Habrá objetivos nuevos tanto para el club como para mí y para los jugadores que van a estar.
-¿Qué objetivos asoman para la próxima temporada?
-Serán muy parecidos a los del último año. Primero, mantener la categoría y seguir siendo competitivos. Estuvimos cerca de clasificar a un playoffs, que es algo durísimo, pero también nos tenemos que plantear poder hacerlo este año. Porque siempre está en mente poder mejorar lo hecho en la temporada anterior.
-¿Los dirigentes te han hecho algún pedido especial?
-No. No hay ningún pedido especial. Ya seguimos una línea de trabajo hace tiempo. Conversamos mucho con los dirigentes sobre la idea seguir con el proceso y con el mismo perfil del año pasado, incorporando jugadores con ambiciones y que tengan ganas de mostrarse en la categoría. Pero siempre manteniendo una base, para luego ir ocupando los puestos necesarios.
-¿Qué experiencias capitalizaron en su primera liga, tanto para no repetir como para incorporar?
-Cada paso que dábamos, cada partido y cada minuto que jugábamos nos fueron dando experiencia. Se aprende de lo bueno y de lo malo. Aquí, a diferencia de otras categorías, los errores se pagan muy caro. Por eso lo importante es tratar de mantener una regularidad. Durante algunos partidos hemos tenido momentos malos, pero bastante largos, que es algo que deberemos disminuir. Pero tanto lo bueno como lo malo nos dejaron experiencias para sumar cosas a futuro.
-¿Cuál es la idea del perfil que tendrá el nuevo equipo?
-En cuanto al perfil del equipo es lo que te decía, primero que nada es mantener una base y, después, que los jugadores que se incorporen deberán tener hambre, querer jugar en la categoría, que quieran estar en el club, que no duden. Los que estén convencidos de venir tendrán un plus y creo que hay jugadores en la Liga Argentina que pueden dar un salto. También nos fijaremos allí porque a varios podrán aprovechar esa posibilidad que les daremos.
-¿El desafío es mejorar la 14° ubicación? ¿Un playoffs tal vez?
-El desafío es mejorar lo hecho la pasada temporada. Sabemos que dejamos la vara alta y será muy duro. Estuvimos cerca de clasificar. Trataremos de ratificar lo bueno que se hizo en la Liga pasada y además intentaremos dar ahora un pasito adelante. Sabemos que será complicado pero está bueno el hecho de poder renovar las expectativas.
-Retirado Fernando Martina, suena el nombre de Franco Barroso. ¿Es así?
-La salida de Fernando nos puso a buscar un reemplazante. Pensamos que una de las opciones para suplirlo será la de Franco Barroso, como primera opción. También hay otros jugadores hablados y veremos en estos días que cerramos.
-¿Piensan en incorporar refuerzos extranjeros?
-No, la idea es armar un equipo con jugadores nacionales. Sin extranjeros.
-Arrancás tu 11° temporada en Independiente, ¿Se puede decir que ya tenés un juego de llaves del club?
-Jaja (ríe). La verdad que hace mucho tiempo que estoy en Independiente. Hemos hecho juntos un camino muy largo. Pero sí. Podría tener un juego de llaves por la confianza que hay con dirigentes y con gente que me apoyó desde un primer momento. Estoy contento de seguir siendo parte del club, por la confianza y por el buen vínculo que tenemos. Asique, en ese sentido, me siento con las llaves en la mano.
