Serbia se enfrentará mañana a Alemania en la final del Mundial de básquetbol de Japón, Filipinas e Indonesia, en una definición impensada en la previa al certamen.
El encuentro se jugará desde las 9.40, de la Argentina, en el estadio Mall of Asia Arena, ubicado en Manila (Filipinas) y transmisión de TyC Sports 2 y DSports.
Los dos grandes candidatos en la previa eran Estados Unidos y Canadá, que quedaron afuera en semifinales, y por detrás aparecían la Eslovenia de Luka Doncic y España, campeón vigente.
Serbia arribó al Mundial con dos ausencias pesadas por lesiones como Nikola Jokic y Vasilije Micic y también con una imagen en la Eurobasket 2022 decepcionante.
De hecho, el inicio le costó hasta que el equipo hizo un clic cuando eliminó a la República Dominicana del argentino Néstor García y accedió a los cuartos de final. Luego de esa jornada, se encargó de dejar afuera a Italia y a uno de los dos grandes candidatos: Canadá en semis.
Por su parte, Alemania, tal vez sin enormes figuras, dio cuenta de su trabajo prolijo en la Eurobasket 2022, en el que pisó semifinales, y ratificó lo hecho cuando dejó en el camino a Australia, medallista de bronce en los últimos Juegos Olímpicos, y avanzó como líder a los cuartos.
Luego, Alemania hizo el trabajo con overol para eliminar a la sorprendente y complicada Letonia y el otro salto lo dio cuando bajó a Estados Unidos (113 a 111) en la previa a la final, instancia a la que accedió por primera vez en su historia.
La clave para entender por qué habrá un nuevo campeón mundial, ya que Serbia nunca lo hizo como país independiente tras salir de Yugoslavia y la fusión con Montenegro, se basó en el juego colectivo y de equipo, sin esperar una salvación individual.
En términos defensivos, la diferencia se hizo aún más evidente, ya que los equipos americanos no pudieron detener las ofensivas europeas en los pa
