El auditorio Carlos Ortiz de La Voz del Interior fue este jueves escenario de una presentación distinta: Instituto mostró su nueva camiseta Givova, pero también hubo declaraciones que valen más que cualquier tela.
Entre los aplausos, las fotos y los flashes, uno de los que habló fue Fernando Alarcón. El capitán. El líder. El símbolo de una Gloria que se aferra a su historia y a su futuro.
Y el Palomo no esquivó el tema que venía flotando en redes y en los grupos de WhatsApp albirrojos: su continuidad. “No trato de pensar en eso, sino trato de disfrutar. Puede ser que sean mis últimos partidos en Instituto. Si llega a suceder eso tengo que hablar con Juan (Cavagliatto). En ningún momento estuve buscando la idea de salir”, aclaró con la tranquilidad de quien se siente en casa.
Alarcón, que tiene contrato hasta fines de 2026, fue claro y directo: “No sé por qué se salió a decir que me iba a ir. No me gustó. Yo nunca dije nada ni hablé con nadie. No sé quién lo dijo. Hasta en mi familia me mandaban las capturas y me preguntaban. Yo tengo contrato con el club. Instituto es mi casa, me siento muy feliz acá”.
Lo dice el mismo que fue héroe en la noche del ascenso, el que levantó la voz en los momentos difíciles y el que más siente el escudo. Por eso también se molestó con los rumores. “Si me tengo que ir se van a enterar por mí y por Juan nomás. Que no salgan a decir mentiras”, disparó, marcando la cancha con el mismo carácter con que lidera desde el fondo.
“En el Apertura le dije al presidente que íbamos a clasificar a playoffs y terminamos entrando ganándole a Talleres. Gracias a Dios cada vez que le dije algo se lo terminé cumpliendo. Esa es la tranquilidad mía”, recordó.
Y enseguida, volvió a dejar en claro su norte: “Hicieron confundir a la gente. Creen que estoy pensando en otra cosa. Y yo estoy con la cabeza en Instituto. Me quiero meter en playoffs, quiero clasificar. Tenemos tres partidos durísimos. Y si nos metemos después puede pasar cualquier cosa, mirá lo que pasó con Platense”.
Alarcón y la nueva pilcha de Instituto
La camiseta nueva lo entusiasmó, pero lo suyo pasa por otra fibra. “Me encantó la camiseta, es hermosa. Ojalá que este viernes comience con algo positivo para nosotros”, dijo, como quien se viste de ilusión y compromiso.
Y sobre Rosario Central, el rival de este viernes en el Monumental, dejó una perlita que pinta su esencia: “Central siempre es como mi casa, tengo muchos amigos ahí que me quieren. Hice todas las inferiores ahí. Hoy me debo a Instituto. Vamos a tratar de conseguir los tres puntos. Con Ángel Di María todo bien, hay que agradecerle por todo lo que nos dio a los argentinos… pero dentro de la cancha pienso en Instituto y nada más”.
Palabras de capitán, sin doble fondo ni especulación. En tiempos de rumores, Alarcón eligió la verdad. Y la verdad es que sigue firme, con la cinta en el brazo y el corazón en Alta Córdoba.
