El campo de juego del estadio Mario Alberto Kempes sigue en el ojo de todos, como sede del encuentro de cuartos de final de la Copa de la Liga entre River y Boca. El césped fue resembrado y cuando se anunció el partido, las primeras imágenes no llevaron tranquilidad.
Con el correr de los días y a casi 48hs de ese juego, el estado del campo mejoró de gran manera y este viernes se mostró con una mejor cara. Todo indica que llegará en muy buenas condiciones para el partido, cuando aún quedan dos días y se espera buen tiempo.
El domingo, si bien están pronosticadas lluvias, el proceso de resembrado habrá cumplido diez días de trabajo, lo mínimo para estar apto para el juego, informó el ingeniero agrónomo a cargo del césped.