En medio de la pausa del torneo Clausura por la reprogramación de las elecciones Paso, Belgrano enfoca sus energías en el duelo por los octavos de final de la Copa Argentina. El equipo dirigido por Ricardo Zielinski enfrentará a Independiente de Avellaneda el viernes 1 de agosto, desde las 18.15, en el estadio de Rosario Central.
El parate del fin de semana le permitirá al cuerpo técnico trabajar con mayor margen de tiempo y evaluar la evolución de algunos futbolistas que arrastran molestias físicas.
Uno de los que preocupa es Santiago Longo, pieza clave en el mediocampo, quien fue reemplazado en el último encuentro ante Independiente Rivadavia por un esguince de tobillo y un traumatismo en el talón. Será evaluado hoy, aunque su presencia ante el Rojo es una incógnita.
Tampoco es segura la participación de Franco Jara, el delantero que sufrió un desgarro en el isquiotibial. El atacante comenzó esta semana con trabajos livianos y, según su evolución, se definirá si podrá estar entre los concentrados.
Otra situación que generó atención fue la de Lucas Zelarayán, quien el martes pasado sintió una molestia que fue en aumento con el paso de los días. Si bien no está descartado, desde el cuerpo médico prefieren llevarlo con cautela para no forzar una lesión mayor.
En cuanto al armado del equipo, Zielinski sabe que no podrá contar con Lucas Passerini ni con Nicolás “Uvita” Fernández, ambos expulsados en el cruce de 16avos ante Defensores de Belgrano, en Villa Mercedes.
Del otro lado, Independiente llega golpeado y sin rumbo claro. En el inicio del Clausura sumó apenas un punto sobre nueve posibles y su entrenador, Javier Vaccari, dejó entrever cierta tensión interna. “¿El mercado de pases? No tengo ni idea. Hablen con los dirigentes”, respondió tras la caída frente a Gimnasia.
El Pirata buscará aprovechar el momento del rival y avanzar de fase en un certamen que le sienta bien. En Arroyito, habrá clima de final.