La final para Boca tuvo un sabor amargo por la derrota, pero a lo largo de la Copa no mostró ser el mejor equipo del continente. Este es el uno por uno del conjunto argentino en la final disputada en Maracaná que quedó en poder del Fluminense por 2 a 1.
ROMERO (6). El arquero tuvo poco trabajo a lo largo del juego y en las dos conquistas del campeón, nada pudo hacer. Cuando Fluminense manejó el partido en la primera porción del juego, se mostró seguro.
ADVÍNCULA (7). Un gran partido del lateral que fue siempre salida para el Xeneize. Marcó un golazo en el ST para devolverle la esperanza a Boca, después fue quien más se entregó física y anímicamente cuando el resultado era adverso.
FIGAL (6). Cumplió su trabajo de ganarle a Cano en los 90. En la jugada del gol de Kennnedy salió lejos y perdió la referencia del goleador. Inexplicablemente se fue reemplazado cuando estaba haciendo un buen partido.
VALENTINI (6). No empezó bien, se equivocó en un par de entregas, pero después ajustó la marca y comenzó a ser un gran pilar de la defensa.
FABRA (4). Pasó al ataque seguido sin buenas terminaciones, pero sin ayuda por la banda mostró todas sus dificultades para marcar y completó una actuación floja haciéndose expulsar de manera tonta por aplicar un golpe en el cierre del PTS.
MEDINA (5). Mal parado en el inicio del partido corrió desde atrás a los volantes locales. Cuando se ordenó empezó a jugar más y entrar en contacto con la pelota. Le faltó determinación para tratar de romper la defensa brasileña cuando el “Flu” se cerró.
G. FERNÁNDEZ (6). Trató de ser el patrón del medio campo de Boca. “Pol” mostró en pinceladas su juego pero sin ser trascendente. Se fue apagando con el correr de los minutos y cuando el partido se puso cuesta arriba nunca se animó a intentar más.
E. FERNÁNDEZ (5). No empezó bien el partido. No pudo ganar la pelota ni generar pases. Se equivocó en un par de entregas. En el segundo tiempo mejoró su juego, pero equivocó algunas decisiones de manejo de la pelota. Se fue extenuado en el arranque del tiempo extra.
BARCO (4). Le pesó la final y se notó. Se equivocó en balones simples, perdió en la mitad ante los volantes locales y de a poco diluyó su juego. La única que hizo fue un pase a Cavani que el uruguayo no resolvió. Nunca lanzó buenos centros y se mostró errático en el campo. Estuvo bien reemplazado.
MERENTIEL (4). Sin peso en ataque a pesar de haber dejado hasta la última gota de sudor en campo. Pero nunca resolvió bien lo poco que se le presentó. Un remate en una contra de media distancia y nada más. No se acopló a Cavani y no tuvo peso en ataque.
CAVANI (4). Entró poco y nada en juego. Algunas pelotas rebotadas para atrás y no mucho más. A los 17 del PT, Barco le sirvió una pelota para que definiera y resolvió jugarla para atrás y lo hizo mal. Se fue lesionado sin aportarle nada al ataque.
LANGONI (4). Ingresó para evitar las escaladas del lateral de su sector y darle una mano a Fabra en la marca. No tuvo mucha participación en el juego y se apagó sin generar nada en ataque.
BENEDETTO (3). Nada de un delantero que supo ser de los mejores del fútbol doméstico. No ganó las divididas, no le aportó peso aéreo al equipo y hasta jugó a contramano en el ritmo del resto. Un final de ciclo anunciado hace tiempo.
JANSON (4). Su ingreso se planteó para intentar aportar juego ofensivo por la banda. Buscar romper en el uno contra uno pero nunca lo logró. Cuando Fluminense se metió atrás se quedó sin espacio y sin ideas para tratar de aportar algo.
SARACHI. Almirón lo colocó como un lanzador de centros y no logró meter uno con precisión al área, sus disparos pegaron en las piernas del jugador rival más cercano o terminaron en la cabeza del primer defensor.
TABORDA. Otra de las inexplicables decisiones de Almirón, poner a un juvenil en un partido caliente para que sea el dueño de la pelota detenida. Obviamente falló en cada intento. La presión lo sobrepasó.
VALDEZ. Ingresó por Figal y se fue a parar al lado de Benedetto para intentar pescar algo, pero Boca nunca tiró un buen centro en el final del partido.
