Belgrano jugará el tridente final de partidos en el que algunos jugadores tendrán examen final para saber cuál será su futuro en el club.
No es que la determinación se adopte por estos tres partidos pero, aquellos que están con el promedio justo, pueden o no aprobar la materia en esta seguidilla de exámenes.
El caso más emblemático es el de Bryan Reyna, quien después de haber tenido algunos partidos interesantes y actuaciones convincentes, entró en conflicto con el exentrenador Juan Cruz Real y perdió espacio y consideración en el equipo principal.
El delantero peruano tiene características que en el plantel del equipo de Alberdi no hay y ese es un punto a su favor de gran valor. Puede aportar más de lo que ha dado en las últimas fechas y todos sostienen que sí, pero es él quien debe demostrarlo. Además, aún tiene contrato con Belgrano, quien pagó 900 mil dólares por el 80% de su ficha.
Estos tres encuentros que quedan, o los minutos que tenga él en campo, servirán para resolver de qué lado de la línea está y si finalmente seguirá o no en el equipo cordobés.
Reyna sabe que esta puede ser su última gran oportunidad de subirse al fútbol de los campeones del mundo y soñar con que, desde aquí, puede lograr que la puerta de Europa, la que está más cerca, pueda abrirse. De lo contrario, estaría cerca de regresar a su país para completar allí su carrera de profesional.