Talleres está a las puertas del partido más importante de su historia en el fútbol femenino, cuando este viernes desde las 19.30 reciba a River por los cuartos del final del torneo de primera división.
Las Matadoras podrán jugar en casa ante un rival al que ya enfrentaron en el torneo y al que buscarán superar para meterse en semifinales. El equipo de barrio Jardín está jugando su primer temporada en la máxima categoría y ya logró meterse en puestos de playoffs.
Entre uno de los refuerzos para este segundo semestre, llegó Catalina Primo, delantera de 25 años que tubo un paso por el club en 2019 y se identifica con Talleres.

La jugadora tiene experiencia en las juveniles argentinas, en Racing, Talleres, UAI Urquiza, River y el fútbol de Brasil. Pudo anotar un tanto en la fase regular y debió perderse algunos juegos por lesión. Ahora, luego de un largo parate en el torneo doméstico, está lista para competir buscando el sueño.
En una charla mano a mano con La Voz, Catalina analiza el presente, la decisión de volver a Córdoba y sus sueños con la camiseta de Talleres.
- ¿Cómo fueron transitando este largo y atípico parate en medio de la temporada de un mes y medio?
- La verdad que es difícil que el torneo tenga estas modalidades, con tanto tiempo parado. No es lo mismo que si se juega una fecha FIFA, que para una o dos semanas, a lo que pasó este año, que fue bastante atípico. Para mí es la cuarta pretemporada, y para muchas de las chicas es la tercera, entonces el cansancio pesa un poco, más aún a fin de año. Sin embargo, se disfruta mucho entrenar en Talleres con las chicas; tenemos un grupo muy lindo. Los amistosos que jugamos nos ayudaron a cortar un poco con la espera, pero la semana se está haciendo lenta.
- ¿Qué significa enfrentar a River Plate en estos cuartos de final, club en el que ya estuviste?
- Es un desafío. La verdad que no esperábamos que fuera River, sino otro rival. Estar en esta situación es un privilegio. Solo ocho equipos en el país tienen la suerte de estar en cuartos de final. En el último encuentro contra ellas empatamos 0 a 0, así que será un partido parejo y tendremos que dejarlo todo para ganar el pase a la semifinal. Enfrentar a River es lindo. Es un club al que aprecio mucho, en el que viví momentos hermosos y donde todavía conservo muchas amigas. Son el estilo de partidos que como jugadora, al menos yo, quiero jugar, y más en instancias finales.

- ¿Qué balance haces de estos meses en tu regreso a Talleres?
La verdad que es lindo. Estoy muy feliz porque yo vine a competir y lo estamos demostrando, clasificando a cuartos. Por ahí la situación hubiera sido distinta si no clasificábamos, aunque también sería comprensible porque es el primer año de Talleres en la A y somos un equipo en construcción. Fue una decisión muy difícil para mí volver, pero acertada. Hoy la estoy disfrutando.
- ¿Por qué dijiste que era una sorpresa volver a Córdoba después de tu paso por Brasil?
Fue una sorpresa. Cuando uno se va del país, cree que va a seguir jugando en el extranjero. Yo jugué el Brasileirão que dura los primeros seis meses. Mi club logró el objetivo de no descender, que es un mérito allá. La segunda mitad del año es mucho menos competitiva; se juega el Estadual, que es como una liga cordobesa. Tenía otras oportunidades de ir a España o volver a River, pero empecé a escuchar la idea de Talleres y dije: “¿Por qué no?”. Es mi casa. Fue un caminito donde me fueron convenciendo, y dejé que se diera.

- Dada tu experiencia, tenés más de 100 partidos en AFA y un paso por el exterior, ¿qué rol asumís dentro del plantel joven de Talleres?
La que se fue era una niña de 17 años. Hoy, con 25 años y toda esta experiencia, creo que me agarra en la plenitud, en esa edad bisagra entre que sos joven, pero ya tenés algo de experiencia. Yo soy una más, creo que ese es el rol que hoy por hoy tengo que ocupar. El plantel ya tiene sus referentes y capitanas. Sin embargo, me gusta mucho acercarme a las más chicas, preguntarles cómo están y aconsejarlas, aunque siempre respetando su margen para el error y el aprendizaje. Intento contagiar el sentido de pertenencia que tengo hacia el club.
- El Talleres que integraste anteriormente tenía muchas jugadoras jóvenes, hoy pasa lo mismo. ¿Qué tiene el club para que sus juveniles se adapten tan rápido?
-Confianza, creo, lo principal. Tenemos un técnico que sabe que Talleres tiene inferiores muy ricas, o sea, hay muchas jugadoras muy buenas por pulir, y que cuando la suben a primera se le exige igual que una jugadora de experiencia. Entonces, es como mejorar o mejorar, y después hay jugadoras con mucho hambre, independientemente de la edad. Porque podrían jugar para divertirse y ya, pero no, se les inculca bastante eso de competir y creo que está bárbaro porque es lo que va a hacer que sigue exportando muchas jugadoras afuera.

- ¿Para qué está hoy Talleres? ¿Se ilusionan con la final?
Sí, obviamente. Los partidos hay que jugarlos. Nuestro rival de cuartos fue un partido reñido en la fase grupos, empatamos 0 a 0. Queremos llegar a la final y si es posible ganarla. Nadie nos dijo que no nos podíamos ilusionar. Trabajamos muy duro físicamente en esta pretemporada para poder aguantar y empujar los 100 minutos de juego, y ahora es el momento de hacer que todo ese esfuerzo valga la pena.
- ¿Hasta cuándo tiene contrato con Talleres y cuáles son sus objetivos personales? ¿Buscás volver a la selección?
Tengo contrato hasta diciembre que viene. Mi idea no es irme a ningún lado por ahora, sino cumplir con mi palabra y mi contrato. Yo soy partidaria de disfrutar lo que tengo ahora y no pensar tanto en el después. Sería un error de mi parte no disfrutar el buen momento que estamos viviendo. En cuanto a la selección argentina, después de haber estado, siempre quedan las ganas de volver a tener una oportunidad. No es un tema que ocupe mucho lugar en mi cabeza, ya que yo trabajo todos los días para el club que represento, y sé que eso indudablemente lleva a volver a tener la oportunidad.

























