Siguen los coletazos por el hecho de discriminación que sufrió el futbolista de Talleres, Miguel Navarro, en el cotejo ante São Paulo en Brasil por Copa Libertadores.
Damián Bobadilla, jugador del conjunto local, le dijo “venezolano muerto de hambre”, lo que provocó las lágrimas del jugador del Matador, que quiso abandonar el campo.
Luego, realizó la denuncia ante Policía Militar en Brasil.
Bobadilla, horas más tarde, decidió hacer una disculpa pública en redes sociales.
“Fue un partido muy caliente y con clima tenso durante todo el partido. Después del segundo gol nuestro tuve un cruce de palabras con el jugador de Talleres, donde fui ofendido primeramente y tratado con desprecio. En la calentura reaccioné mal, pido disculpas públicamente, pero nunca tuve la intención de discriminar a nadie”, expresó Bobadilla en su declaración.
Ahora quien se sumó a este tema fue el ex arquero paraguayo José Luis Félix Chilavert, una leyenda del fútbol de su país.
“Chila” hizo declaraciones radiales ante “La Unión FM” donde defendió a su compatriota y habló de “generación de cristal” al referirse a Navarro.
“Las personas que hemos jugado al fútbol nos dicen de todo. En Argentina me decían ‘paraguayo muerto de hambre’, ‘ándate a tu país a robar’...Después si lo trasladamos a mi paso por España me decían ‘indio’, ‘sudaca’, en Francia lo mismo. Hoy le llaman generación de cristal a esta generación, porque este mismo jugadores que insultó a Enciso cuando falló el penal, le dijo de todo... Y es el mismo jugador que se pone a llorar. Ahí te das cuenta que cada uno busca llevar agua a su molino, como le conviene”, dijo Chilavert, haciendo referencia a una situación que vivió el propio Navarro en un cotejo entre Venezuela y Paraguay.
“Su presidente asesino como Nicolás Maduro mata gente... Y matan de hambre a su propia gente por pensar diferente. Hoy decir ‘muerto de hambre’, ‘negro’, parece que te tienen que llevar preso. Todos dicen que hay que luchar contra el racismo y la discriminación, pero por qué siempre se sanciona al paraguayo. ¿Por qué no se sanciona a un brasileño o argentino?”, agregó Chilavert, polémico como siempre.
“Me solidarizo con Damián Bobadilla, dentro de la cancha vale todo. A mí me gritaban: paraguayo muerto de hambre y no andaba llorando... En su momento le escupí a Roberto Carlos porque me dijo: Indio, le ganamos 2-0. Yo tenía que defenderme de alguna manera”, completó.
