Instituto siempre ha sido una cuna de talentos y, en este escenario, el nombre de Tomás Peralta sonó con fuerza en la última pretemporada albirroja.
Este joven extremo de la categoría 2007, que actualmente milita en la quinta división de AFA, captó la atención del director técnico Daniel Oldrá, consolidándose como una de las más firmes promesas del club de Alta Córdoba.
Su historia es un testimonio de desarrollo, paciencia y el ojo clínico de instituciones como el Club Camioneros.

Un camino forjado desde la Liga Cordobesa
La travesía de Peralta en el fútbol no comenzó en Camioneros ni en Instituto.
Según relata Adrián Ávalos, coordinador del club Camioneros y ex-jugador de Talleres y de Belgrano, fue Camioneros el que lo trajo desde Unión San Vicente. “Nosotros lo veníamos observado”, explica Ávalos. Curiosamente, Talleres también lo tuvo en sus filas, pero con pocos minutos, lo devolvieron a su club de origen. Fue en 2021 cuando Camioneros, tras negociaciones con la CD de Unión San Vicente, logró incorporarlo.
Una vez en Camioneros, el ascenso de Tomás fue meteórico. En “el corto plazo empezó a ser uno de los más destacados del club”, recibiendo el apoyo constante a través de becas deportivas y la oportunidad de viajar a Buenos Aires para competir y mostrarse.
Su talento no pasó desapercibido, y era observado por grandes clubes como River y Lanús, e incluso por Belgrano en etapas más recientes. El proceso en Camioneros fue “lindo” y le permitió jugar Regionales por dos años consecutivos y alternar con la Reserva, siempre compitiendo con categorías superiores.
“Tomás Peralta es un jugador que a Camioneros lo trajimos desde Unión San Vicente. Nosotros lo veníamos observado. Talleres lo lleva desde Unión y ahí tuvo pocos minutos de juego. Lo devuelven al club de origen, y en 2021 empezamos las tratativas para incorporarlo al club. Después de tratar con la CD de Unión San Vicente se llegó a un acuerdo y se incorporó a Camioneros. En el corto plazo empezó a ser uno de los más destacados del club, que siempre lo fue acompañando con becas deportivas. Tomás ha sido un jugador que fue observado por River y por Lanús. Viajó muchas veces a diferentes lugares para ser evaluado. Este año se cerró su situación deportiva en Instituto y sin dudas ha mostrado todo su potencial”, contó Ávalos.

Perfil de un jugador moderno: explosión y compromiso
Ávalos describe a Peralta como un futbolista con un “potencial físico y explosivo muy interesante”. Es un jugador “mixto”, que no solo ataca, sino que también “retrocede” y “se brinda para el equipo”.
Su principal cualidad en el ataque es su “desequilibrio con el balón a través de la velocidad”. No obstante, como todo joven en formación, Ávalos señala un área de mejora: “Por ahí tendrá que encontrar esa tranquilidad dentro del área para poder convertirse en un gran delantero, en un gran goleador”.
La familia de Tomás ha jugado un rol fundamental en su desarrollo, es “muy futbolera” y comprende la necesidad de darle “su espacio, sus tiempos y su maduración”.
Ávalos enfatiza la importancia de no acelerar el proceso y lo califica como una “carrera de resistencia” que requiere paciencia. El fútbol actual exige jugadores explosivos, dinámicos y que trabajen para el equipo; y según Ávalos, Tomás “lo tiene”.
“Fue un proceso lindo, por el hecho de estar en Camioneros pudo jugar Regionales dos años consecutivos y fue alternando con Reserva. Siempre jugó con una categoría superior a la suya. Uno, desde la coordinación, está muy contenta por esta realidad, tanto la de él como de Uriel Guzmán (actualmente en Reserva), Tiziano Godoy (2006) y muchos chicos del club que han emigrado. Vamos cerrando un lindo proceso y acompañando todo el proyecto del club. Lo seguimos a Tomás en su proceso y nos pone felices. Su familia es muy futbolera y supo comprender que él necesita su espacio, sus tiempos y su maduración. No hay que acelerarlo, es un proceso largo. Lo más importante es que tiene el perfil para ser un jugador profesional, para lo que hoy el fútbol demanda, ser explosivo, dinámico y, a la hora de trabajar, hacerlo para el equipo, Tomás lo tiene”, agrega Ávalos.


El salto a Instituto y la filosofía de Oldrá
Este año, la situación deportiva de Peralta se cerró con su llegada a Instituto, donde “sin dudas ha mostrado todo su potencial”.
Su integración al primer equipo no tardó en llegar: fue subido por Daniel Oldrá y jugó como titular en un amistoso ante Independiente Rivadavia de Mendoza. Además, ya estuvo citado para el partido de Copa Argentina ante Huracán.
La presencia de Daniel Oldrá en Instituto es crucial para el desarrollo de juveniles como Tomás. Ávalos expresa su respeto por el DT, destacando su trayectoria en Godoy Cruz de Mendoza, donde era conocido porque “sacaba jugadores de la nada”.
“La llegada de Oldrá a Instituto, un técnico que hace hincapié en divisiones inferiores, fue clave. Oldrá lo ha dejado más que demostrado en Godoy Cruz, de donde sacaba jugadores de la nada, mis respetos para él. Es muy meritorio poner jóvenes en situaciones en las que los clubes se enfocan sólo en el resultado. La prioridad del club debe basarse en un proceso. Estos jugadores deben estar preparados de una forma adecuada para que, cuando les toque debutar, estén a la altura. Hay algunas instituciones que hacen debutar a jóvenes para salir en la tapa del diario y los chicos no están a la altura, y terminan siendo quemados”, agrega Ávalos.


El legado de Camioneros en la formación de talentos
El caso de Tomás Peralta es un orgullo para el Club Camioneros. Adrián Ávalos, desde su rol de coordinador, celebra esta realidad y la de otros jóvenes talentos que han emigrado. Camioneros se consolida como un club de la Liga Cordobesa que “sigue preparando juveniles y exportando a otros clubes de AFA”. El acompañamiento a los chicos es fundamental, asegurando que tengan “buen descanso, buena alimentación”, aspectos clave para evitar lesiones al dar el salto de la Liga Cordobesa a la exigencia de una competencia de AFA.

Entre Camioneros e Instituto se firmó un convenio, como se hace con todas las instituciones, en caso de que el futbolista “explote” y pueda darse una futura venta, generando ingresos para ambos clubes.
Tomás Peralta representa la nueva ola de talentos cordobeses. Con el apoyo de su familia, la formación de Camioneros y la tutela de un técnico como Daniel Oldrá, tiene el “perfil para ser un jugador profesional”, según Ávalos.
Su explosividad y su compromiso con el equipo lo posicionan como una promesa para seguir de cerca.