Desde su regreso al fútbol argentino, Ángel Di María demostró en varias oportunidades su jerarquía y calidad. Además de destacarse con jugadas individuales y un golazo en el clásico rosarino ante Newell’s, el campeón del mundo sorprendió con un gol olímpico a Boca. Sin embargo, sus declaraciones posteriores sobre Leandro Brey generaron una fuerte polémica entre los hinchas xeneizes. En las últimas horas, el Fideo salió a explicar sus palabras.
El revuelo en redes sociales fue inmediato: muchos interpretaron sus dichos como una falta de respeto hacia el arquero rival. Pero Di María aclaró que su comentario apuntaba a la inactividad del joven guardameta y que simplemente lo había considerado un aspecto táctico a tener en cuenta.
“Mucha gente se lo tomó a mal de lo que dije de Brey, pero es algo normal que uno mira y observa durante la semana qué es lo que mejor podemos hacer para poder hacer un gol o de la manera que podamos“, explicó el rosarino en diálogo con DSports.
Y agregó: “Y la manera era esa: el chico venía sin atajar, entonces nosotros teníamos que ver cuál era. Cuando venís sin atajar, es igual que el jugador, estás sin confianza. Y en los córners, nosotros tenemos buenos pateadores, a Quintana, Mayo, Comar, Véliz, Copetti, tenés jugadores que van de cabeza espectacular. Entonces es meterla ahí bien cerrado e intentar que el chico tenga alguna dificultad”.
“Fue algo que practicamos en la semana”
El delantero aseguró además que la jugada había sido trabajada durante los entrenamientos y que no fue producto del azar: “Los centros en el entrenamiento lo habíamos hecho así, habían salido muy bien. En el partido, el primero la cortó Edi (Cavani) ahí en el primer palo y la siguiente terminó entrando”.
En ese sentido, Di María evitó entrar en polémicas sobre la responsabilidad del arquero y destacó el mérito de la ejecución: “Muchos hablan de que si fue culpa de él o no, si fue más mérito mío... El centro, si vos lo ves de la parte de atrás, la pelota como que parece que va al primer palo y después se sigue abriendo y baja muy rápido al final. Entonces se le complica al arquero, tenés jugadores alrededor. Es difícil también, no es tan fácil. Pero bueno, la pelota terminó entrando y para mí era lo importante. Queríamos empatar el partido y se empató de esa manera”.
Qué había dicho tras el partido
Minutos después del encuentro, Di María había explicado: “Sabíamos que el chico no venía atajando, que podíamos tener alguna chance de pelota parada y jugarle ahí medio cerrado, y se terminó dando el gol”.
Y había sumado: “Lo busqué un poco, porque ya habíamos hablado que venía sin jugar y a veces cuando un arquero viene sin continuidad, no tiene esa confianza. En estas pelotas así, con el estadio lleno y la presión, tenés esa posibilidad. Entonces intentamos jugar los centros bien cerrados y se terminó dando”.