La igualdad 1-1 entre Rosario Central y Talleres en el Gigante de Arroyito dejó un sabor amargo en el equipo local. La figura del encuentro, Ángel Di María, no dudó en expresar su descontento al finalizar el partido. El campeón del mundo fue protagonista con una asistencia para el golazo de Alejo Véliz, que puso en ventaja a los dirigidos por Ariel Holan antes del descanso.
Sin embargo, su fastidio fue evidente tanto por el resultado como por las circunstancias que lo rodearon.
El “Fideo” se mostró visiblemente molesto por la forma en que Talleres llegó al empate. “Nos sigue faltando ese poquito. Salimos dormidos en algún momento siempre y nos terminan haciendo un gol de mierda”, declaró Di María ante la TV.
Esta dura calificación al tanto de Valentín Depietri refleja la frustración de un equipo que sintió que “perdió dos puntos" por una desatención propia.
Además del lamento por el gol recibido, Di María aprovechó para responder a las críticas sobre supuestos favores arbitrales hacia Rosario Central. El fastidio del jugador se potenció al considerar que, tras el empate, el equipo rival se replegó.
“Al final te termina dando un empate porque se meten atrás, después dicen que nos ayudan”, sentenció, dejando entrever su malestar con los comentarios externos sobre el desempeño de los árbitros en los partidos del “Canalla”.
El encuentro, correspondiente a la novena jornada del Torneo Clausura, había comenzado de manera favorable para Central. La conexión entre Di María y Véliz ilusionó a los hinchas locales, pero el equipo se quedó en el segundo tiempo, permitiendo la reacción de la “T”.
Ni siquiera la ventaja numérica tras la expulsión de Miguel Navarro en el equipo cordobés fue suficiente para que Rosario Central pudiera quedarse con la victoria.
El resultado final dejó a Di María con una mezcla de autocrítica y enojo, apuntando tanto a los errores propios como al debate público sobre los arbitrajes.
