Talleres rompió la pared y pudo consagrarse campeón de un título local, nada más ni nada menos que contra River, en la Supercopa Internacional.
Venciendo por penales a River en un encuentro eterno, el Matador tocó el cielo con el gol que hizo Benavídez en la definición que terminó con sonrisa.
La emoción floreció en todos y cada uno, los de acá y los de allá, en cada festejo. Y uno que sabe de transmitir emociones es “el Bocha” Houriet, quien relató con sentimiento la copa para el Matador.