La selección argentina Sub 20 enfrentará a Marruecos en la gran final del Mundial de Chile 2025 el próximo domingo. Y lo hará con una buena noticia: Diego Placente recupera a Maher Carrizo, una de las figuras del equipo, quien regresa tras cumplir una fecha de suspensión.
El futbolista de Vélez Sarsfield se perdió la semifinal ante Colombia por acumulación de amarillas, pero volverá al once titular para buscar el séptimo título mundial en la historia del seleccionado juvenil, un récord absoluto en la categoría.Placente no podrá contar con Álvaro Montoro ni Valente Pierani, ambos lesionados, pero celebra el regreso de Carrizo, a quien definió como “importante por cómo juega y lo que aporta en ofensiva”.
Antes de la semifinal, el DT había elegido a Ian Subiabre como su reemplazante, aunque en el entretiempo ingresó Mateo Silvetti, autor del gol del triunfo. Placente explicó que, más allá de los nombres, su idea era mantener “la propuesta que distingue al equipo”.
El aporte de Maher Carrizo
Durante el Mundial de Chile, Carrizo disputó cinco partidos como titular, sumando tres goles y una asistencia en 364 minutos. Más allá de los números, su influencia fue determinante en momentos clave del torneo.
Anotó un doblete decisivo ante Nigeria en los octavos de final —abriendo el marcador con un tiro libre y sentenciando el partido en el complemento— y convirtió nuevamente frente a México en cuartos, en un partido muy cerrado.
No es la primera vez que el santiagueño responde en instancias decisivas: en el Sudamericano de Venezuela, también fue clave en el tramo final, con cuatro goles en el hexagonal, incluyendo un doblete frente a Uruguay.
Frescura, ritmo y experiencia
A sus 19 años, Carrizo aporta velocidad, desequilibrio y lectura de juego, tres cualidades que encajan a la perfección en el sistema flexible de Placente.El técnico destacó la capacidad del equipo para adaptarse a los momentos de los partidos, y Carrizo es un ejemplo claro: puede asociarse en los circuitos de juego o aparecer como definidor en el área, dependiendo del contexto.
En la gran final, su uno contra uno, su capacidad para romper líneas y su energía en ataque serán fundamentales para la Albiceleste, que busca coronar una campaña sobresaliente.
