River y Boca dan vida a dos campeonatos que sólo juegan ellos. Uno es el que los enfrenta una, dos, tres, cuatro o las veces que sea en el año... y el otro es por saber cuál gana más títulos en la temporada.
Después, se verán las formas, ya que lo único que está claro es que el fin justifica los medios. La inversión que ambos hicieron los acerca por lo que gastaron pero también los divide. Es, quizá, otro certamen para ver a quién le fue mejor o peor en el mercado.
Para darse una idea...Marcelo Saracchi fue parte del River que hizo historia ante Boca en el Bernabeu en la obtención de la Copa Libertadores 2018 y, ahora, en Boca, llegó a ser... su capitán.
El marco formal de este partido, que se jugará el domingo a las 15.30 y en el Más Monumental, presenta las siguientes referencias.
Boca es el puntero de la Zona A del Apertura de Liga Profesional con 32 unidades en 14 partidos y quiere conservarse así en estos dos partidos que le restan en la fase regular para poder definir de local en las instancias eliminatorias cuyo arranque será en octavos de final. Este frente y el de la Copa Argentina (debe enfrentar a Atlético Tucumán por 32 avos de final) es lo inmediato después de fuera eliminado por Alianza Lima en la fase 2 del repechaje de la actual Libertadores.
River está cuarto con 25 puntos y marcha cuatro en la Zona B que lidera Rosario Central (29) y, al igual que su archirrival, intentará ser primero para poder definir de local en las instancias eliminatorias que juegue. Mientras tanto, afronta la Copa Libertadores donde va primero del Grupo D con cuatro unidades en dos partidos y espera por su debut de Copa Argentina, previsto para el 7 de junio, ante San Martín de Tucumán.
El Apertura es el primero de los certámenes en los que enfrentará a Boca y podría haber un cruce en instancias eliminatorias. Es el mismo criterio que se aplica para el Clausura, donde al menos habrá un clásico y será el 09/11/2025 como interzonal de la 15ª fecha. Si clasifican, podrán cruzarse nuevamente, en esos partidos decisivos.
¿Más? Si ambos avanzan en el certamen federal solo podrán chocar en la final.
Lo cierto es que este clásico será la previa al Mundial de Clubes. Boca debutará el 16 de junio ante Benfica y River, al día siguiente contra Urawa Red Diamonds. Solamente se cruzarían en semifinales.
Números de ricos
Es un campeonato que solamente Boca y River pueden jugar. Entre los dos invirtieron 59.980.000 dólares en este mercado y si bien los montos que más llaman la atención son los de sus compras, no están incluidos los sueldos y otras remuneraciones que forman parte del presupuesto del área fútbol profesional.
“No podemos competir con ellos en el mercado. Un sueldo de un campeón del mundo de River fue pactado en 300 mil dólares. Es imposible. Son jugadores de selección como los que tiene Boca”, sostuvo un integrante del cuerpo técnico de Alexander Medina, cuando estaba en Talleres y con referencia al último mercado.
River y Boca estaban parejos en lo que venían gastando, pero la diferencia la terminó haciendo el club de Núñez que sumó a Kevin Castaño por 12 millones de dólares más.
Boca, el club que preside Juan Román Riquelme, incorporó a Alan Velasco (10 millones de dólares, la segunda compra más cara en la historia del club) más los chilenos Carlos Palacios y Williams Alarcón, el lateral Ayrton Costa, entre otros. Después, el arquero Agustín Marchesín y el mediocampista Rodrigo Battaglia arribaron por alrededor de 1,5 millones de dólares y el español Ander Herrera arribó en condición de jugador libre. El total fue de 25 millones de dólares.
El detalle
- Alan Velasco: U$S 10.000.000.
- Carlos Palacios: U$S 4.800.000.
- Williams Alarcón: U$S 3.800.000.
- Ayrton Costa: U$S 3.500.000.
- Rodrigo Battaglia: U$S 1.600.000.
- Agustín Marchesín: U$S 1.500.000.
- Ander Herrera: libre.
- Total: U$S 25.200.000.

River, en tanto, llegó a 33 millones de la moneda estadounidense. Fueron 10 millones de dólares, por el retorno del delantero Sebastián Driussi, 7,25 por el defensor Lucas Martínez Quarta y 3,63 por el lateral Gonzalo Montiel, todos ellos surgidos de las inferiores del club.
Por Gonzalo Tapia, la dirigencia del Millonario pagó un millón de dólares, mientras que Giuliano Galoppo llegó a préstamo y Enzo Pérez y Matías Rojas lo hicieron en condición de jugadores libres. Con la incorporación de Kevin Castaño rompió “el chanchito”: U$S 12 millones.
El detalle
- Sebastián Driussi: U$S 10.000.000
- Lucas Martínez Quarta: U$S 7.250.000.
- Gonzalo Montiel: U$S 3.630.000.
- Gonzalo Tapia: U$S 1.000.000.
- Giuliano Galoppo: préstamo
- Enzo Pérez: libre.
- Matías Rojas: libre.
- Kevin Castaño: U$S 12.900.000.
- Total: 34.780.000.
Juego pendiente
Después de la eliminación de Libertadores ante Alianza Lima, Boca ganó seis partidos (Rosario Central, Central, Defensa, Barracas, Belgrano y Estudiantes) y solamente perdió uno (con Newell’s). Su poder de gol es temible ya que suma 22 conquistas (solamente superado por los 23 de Racing) en Liga y disfruta de un gran momento de Edinson Cavani -al fin-, Carlos Palacios, Miguel Merentiel y a Milton Giménez (hoy lesionado).
También tiene la valla menos vencida (8), pero mucho a tenido que ver con la poca puntería que tuvieron sus rivales y actuaciones determinantes de Agustín Marchesín, sobre todo ante Estudiantes. Boca tiene desequilibrios ofensivos importantes y cuestiones de juego pendientes, pero el poder de gol que tiene ha sido un gran paragua.
River el doble frente de Libertadores y de Liga, pero su juego aún tiene cuestiones pendientes. Hasta el 3-0 a Gimnasia LP por el torneo local donde va 4, distaba de lo pretendido por un Marcelo Gallardo en su vuelta a un club en el que es ídolo y con el que ganó 14 títulos con el buzo de DT. Si bien mantienen sus chances en Libertadores y está puntero del Grupo B, la realidad es que de los últimos ocho partidos (hasta antes de Independiente del Valle) ganó tres y empató el resto.
No ha perdido, pero tampoco ha conformado al hincha que también lo hizo blanco de algunos insultos. Por caso, le siguen facturando la final de Supercopa Internacional perdida con Talleres en definición por penales.
Por la cantidad de empates (fueron cinco), la falta de juego, el hecho de tener la pelota más que el rival sin dañarlo como le pasó ante Barcelona de Ecuador y en los dos partidos con Talleres, el DT también fue apuntado al no encontrarle la vuelta al equipo a pesar del oneroso último mercado de pases y del plantel de jerarquía con el que cuenta.
En el Bosque, el DT se refirió a las críticas y fue duro. “Me chupa un huevo. Hace años convivo con eso porque son las reglas del juego y las entiendo así. Pasé por muchas circunstancias y entiendo. Pasé por un montón de lugares y soy una persona sumamente privilegiada porque el fútbol me dio un montón de cosas y me las sigue dando”, sostuvo.
Como se ve, el clásico puede ser un antes y un después en la campaña de ambos. Hay mucho por ganar y, también, por perder.