El único gol del Superclásico en el Monumental desató la euforia de los hinchas millonarios en la tribuna del Monumental y la locura de los jugadores dentro del campo de juego.
El penal convertido por Miguel Borja para River a los 47 minutos de la segunda desató empujones y mucha bronca entre los jugadores.

Mientras Borja festejaba en solitario, el descontrol copó el campo de juego. Empujones, manotazos e insultos le dieron un marco impensado al Superclásico argentino en el marco de un desarrollo tranquilo del juego.
La reacción de los jugadores de Boca respondió a que Palavecino le gritó el gol a Figal.
La locura terminó con siete expulsados. Por el lado de River vieron la roja Palavecino, Centurión y Gómez, mientras que Boca jugó los dos últimos minutos con ocho hombres, ya que Herrera expulsó a Valentini, Merentiel y Fernández, además del entrenador xeneize Jorge Almirón.