El 26 de abril pasado, sábado por la tarde, Belgrano igualó1-1 con Argentinos Juniors en el Gigante de Alberdi. Aquella jornada fue “Uvita” Fernández el que marcó el gol del equipo del “Ruso” Zielinski. Recién este domingo, es decir 85 días después, la “B” volverá a presentarse ante su gente cuando a las 19 se mida con Racing Club en lo que es la segunda fecha de la Zona A del torneo Clausura de la Liga Profesional de Fútbol.
El receso extenso en medio de la temporada y los calendarios alocados del fútbol de AFA, hicieron que casi tres meses después los hinchas del Pirata puedan regresar a las tribunas para alentar al equipo que debutará de local ante la Academia de Gustavo Costas, un equipo “chivo” que se la pone difícil a al “B” en los últimos tiempos.
El Celeste viene de golear a Huracán de visitante 3 a 0 y el ánimo de la gente se elevó hasta las nubes, porque el entusiasmo por un “nuevo” sistema de juego y un equipo más ordenado le permite soñar.
Por eso es que el aforo del estadio estará a pleno de socios. No habrá necesidad de abrir puertas para visitantes o neutrales, todos los que ocupen un lugar en el Julio César Villagra serán “los dueños” del club, porque así lo ha querido la campaña de venta abonos, que como ha sucedido en los últimos años vuelve a decir que todas las tribunas tienen lugares agotados.
La gente responde y siempre está. No hay duda y sí una certeza: cuando los jugadores miren hacia los cuatro costados, el celeste será predominante y el aliento todo de ellos.
Feliz día
La vuelta a la comunión de la gente con el equipo vestido de celeste se dará en el Día del Amigo y qué mejor fecha para que los hinchas puedan ofrecer su aliento por el Pirata, ese que les maneja el humor de la semana en una jornada de festejo.
La fiesta del Día del Amigo será en las tribunas, donde 38 mil simpatizantes serán privilegiados de estar en Alberdi, podrán cantar, bailar, disfrutar, abrazarse con quienes comparten lugares y gozar con su equipo, con el que eligieron para toda la vida.
El Celeste vuelve a jugar de local después de muchísimo tiempo, porque el calendario así lo dispone, pero ni el tiempo ni el almanaque pueden mitigar la pasión o la ilusión de los hinchas que volverán a colmar el estadio y decir “Esta vez, te lo dedico a vos hermano amigo”.