Parece una locura. Un sueño. Pero no lo es. Enzo Barrenechea (18 años, cordobés) tiene puesta la ropa de entrenamientos de Juventus de Italia.
Y el que le pasa al lado trotando es el famosísimo delantero portugués Cristiano Ronaldo. Un segundo después, charla dos palabras con Paulo Dybala. Le dice que también es cordobés y se ríen.
Así, como en un viaje imposible, Enzo pasó de ver a estas estrellas mundiales en TV o usarlos en los videojuegos, a tenerlos al lado.
Barrenechea es uno de los talentos jóvenes más importantes del fútbol argentino. Y él lo sabe. Por eso Juventus no quiso esperar a que llegar a la primera de Newell’s de Rosario y se lo llevó con edad de quinta división, cuando todavía tenía 17 años.
Enzo, un volante de mucha calidad según los que lo han visto jugar, ya había deslumbrado en la cantera de la Lepra a muchos captadores de talentos locales e internacionales, ya que también era regularmente citado a selecciones argentinas juveniles.
Así las cosas, la capacidad de este pibe con la pelota en los pies lo llevó a cruzar el charco y estar ahora en Turín, Italia, viviendo en la pensión de “la Juve”.
Antes, a fines de 2019, tuvo un breve paso por el FC Sion de Suiza, club donde estuvo cedido para irse aclimatando a Europa y, también, conseguir ciudadanía. Algo que está en trámite.
"Yo nací en Córdoba capital y a los 7 años nos fuimos a vivir con mi familia a Villa María. Ahí arranqué en el club de baby El Santo, donde jugué un año para una categoría más grande, porque mi categoría no jugaba todavía por los puntos. Después fiché para el club Sarmiento, donde hice toda mi formación hasta llegar a cancha grande. Ahí pasé a Universitario de Villa María", le relata Enzo a Mundo D, reconstruyendo su historia.
Justamente, Universitario de Villa María se vio favorecido por su pase y recibió 10 millones de pesos que serán utilizados para obras.
Pero volvamos al camino de Enzo.
“Allá en Villa María todos los años se realiza un Mundialito donde van equipos de todas partes del país. Ahí van captadores de talentos de muchos equipos de Primera. Me vieron varios equipos y estaba la chance de ir a River, a Lanús, también a Belgrano y obvio Newell’s. Lo hablamos con la familia y decidimos arrancar en Newell’s”, recuerda Enzo.
En las inferiores de la Lepra, jugó desde novena hasta sexta de AFA, siempre destacándose. En 2019 había firmado un contrato hasta 2022, pero Newell’s necesitaba el dinero y lo vendió por una cifra cercana a los dos millones de dólares. En su trayectoria en Newell’s, llegó a debutar en la reserva del equipo rosarino, en la que totalizó 18 partidos y tres goles.
"Hace un par de años, en octava división, ya pintaba para ser un jugador extraordinario como ya lo sabíamos todos en las divisiones inferiores. Es un jugador espigado, de gran porte, con una técnica fabulosa y un andar en la cancha que deslumbraba", explicó Carlos Polenta, entrenador que lo dirigió en la Newell's en 2016, ante La Capital de Rosario.
El llamado de Juventus
“Cuando estaba jugando en quinta división surge la chance de la Juventus. Yo no tenía el pasaporte italiano, entonces Juventus hizo un convenio con el Sion de Suiza, para que estuviera cuatro meses hasta que me saliera la ciudadanía. En agosto del año pasado me fui a Suiza y estuve hasta diciembre. Regresé a Argentina para las vacaciones y en enero me vine para Italia. No salió la ciudadanía aún, está en trámite y estoy ocupando cupo de extranjero”, resume Enzo.
El juvenil está muy agradecido a Newell’s, que lo cobijó en su pensión y lo formó como jugador y persona: “Fueron varios años que estuve en Newell’s, sin dudas aprendí muchísimo y tuve grandes entrenadores. Todos aportaron cosas importantes para mi formación. Viví siempre en la pensión del club. Hice grandes amigos y compartí todo con ellos, los buenos y malos momentos. Es lo más lindo que te deja este deporte”.
Actualmente, vive en la pensión de “la Juve” y se encontró con un club de primer nivel mundial, donde tiene todas las comodidades.
“Llegar a Juventus es cumplir un sueño, yo creo que todo jugador sueña con estar en un club tan grande así. Tuve que esperar, tener paciencia, pero por suerte se dio todo. Sinceramente, acá todo es increíble. Tuve la posibilidad de ir a un par de prácticas con el primer equipo y tener de cerca a todos esos cracks que veía en la tele, o jugaba en la Play, es una locura. Tenerlos cerca fue increíble. Con Paulo (por Dybala) intercambiamos un par de palabras, pero todos muy bien. La mejor onda. Me trataron de la mejor manera”, cuenta.
Italia es uno de los países más afectados por el coronavirus. Y Enzo hace la cuarentena solo, lejos de la familia, esperando que toda esta tormenta pase pronto: “Lamentablemente Italia es uno de los países más golpeados por este virus. Es muy triste y la gente tiene mucho miedo. Me tocó hacer la cuarentena acá en la pensión del club. Es difícil estar solo y lejos de la familia. Es importante quedarnos en casa y cuidarnos cada uno, por el bien de todos”, señala.
Mientras tanto, espera ansioso que la pelota vuelva a girar para poder compartir prácticas con Cristiano, con Dybala y seguir dándole vida a esos sueños de fútbol que lo llevaron hasta Europa.
"Llegar a jugar en Europa ya es un sueño cumplido. Sé que tengo mucho camino por recorrer, soy chico todavía. Pero voy a poner lo mejor de mi en el fútbol para llegar lo más alto posible", cierra Enzo Barrenechea, un pibe cordobés al que hay que seguir.
