Sólo tenía 10 años Santiago Colombatto cuando armó su bolso y se fue a probar suerte con el fútbol a Buenos Aires.
“Hoy lo pienso teniendo hijos y sí, fue una locura”, cuenta el propio Colombatto, casi 20 años después de aquel momento iniciático.
En esa foto que aún está en su cabeza, un niño de la localidad de Ucacha, en el interior cordobés, dejaba a su familia y se subía a un viaje que ha sido increíble. Y que, tras miles de piedras en el camino, lo llevó al fútbol profesional.
Y no solo eso, los vaivenes de destino lo llevaron a vestir la camiseta de la selección argentina. Una sensación que todavía le camina por el cuerpo. Y que quiere volver a sentir.
Colombatto es un futbolista cordobés, del interior del interior, que la peleó como pocos. Que quizá no tenga el cartel ni la chapa de otros.
Pero que fue parte del nacimiento, de la génesis, del ciclo de Lionel Scaloni al frente de Argentino.
Vio por televisión como muchos de esos jugadores que fueron sus compañeros levantaron la Copa del Mundo en Qatar 2022.
Y hoy, desde su humilde lugar, trabaja cada día para volver a estar ahí, para ser considerado, visto.
Claro que no la tiene fácil, pero es algo que ya conoce.
Colombatto se fue de Ucacha para sumarse a las inferiores de River, donde pintaba como un volante central de proyección. Pero lo dejaron libre.
Luego estuvo en Racing de Avellaneda, donde otra vez volvió a toparse con un “no”.
Pero no bajó los brazos y siguió.
Gracias a un amigo viajó a Italia y terminó fichando en el Cágliari, gracias a un jugador colombiano que le dio una mano grande y se terminaría transformando en su representante, el reconocido defensor Iván Ramiro Córdoba.
Así forjó una carrera que lo llevó por clubes como Pisa, Trapani, Perugia, Hellas Verona, Sint Truidense de Bélgica, León de México, Famalicao de Portugal y desde 2023 en el Real Oviedo, hoy en la segunda división de España.
En el medio, logró ser seguido y convocado por la selección argentina, donde integró la Sub 20 en el Mundial 2017 de Corea del Sur y también en los Juegos Panamericanos de Lima, en 2019. También estuvo en los Juegos Olímpicos de Tokio, en 2020.
En todo ese proceso compartió equipos con campeones del mundo como Juan Foyth, Gonzalo Montiel, Lisandro Martínez, Exequiel Palacios y Lautaro Martínez. Y sueña con volver a estar.
Del pequeño Ucacha al mundo
Según el censo de 2022, Ucacha tiene 5.808 habitantes. A esa localidad del departamento Juárez Celman vuelve siempre cuando puede “Santi” Colombatto. Allí están sus amigos y familia.
Y allí arrancó esta historia, en el club Jorge Newbery.
“Ahí fue donde empezó todo. Mi pueblo para mí es muy importante. Siempre que puedo, vuelvo y estoy unos días. La última vez fue hace unos meses. Pude ir después de un año y medio. Pero una vez al año me llego. Me gusta mucho mi pueblo, estar con amigos, la familia. Disfruto mucho estar en mi tierra. Toda la gente querida está allá. No hay como mi casa… Tenemos pocos habitantes, pero no hay lugar como ese en el mundo”, se sincera Colombatto, que ha vivido en Italia, España, México y Portugal, ante Deportes de La Voz.
“Yo me fui a los 10 años para Buenos Aires, lo que fue una locura. Hoy soy padre de dos nenes y veo a los chicos de 10 años y me digo que fue una locura. Era muy chiquito realmente. Tanto para mí como para mis padres y mis hermanos, fue muy fuerte. Pero al final todo es aprendizaje. Me perdí muchas cosas de la infancia, del chico de pueblo, pero gané por otro lado. Viví muchas experiencias que te hacen crecer más rápido”, agrega Colombatto.
Después de mucho andar, hoy se encuentra establecido en el Real Oviedo, un equipo conocido de España que hoy está en Segunda.
Allí, “Santi” se ha transformado en un líder y baluarte, querido por la hinchada. Y desde allí intenta volver a ser “visto” por los clubes más importantes de Europa.
“Ya hace un año y medio que estoy en Oviedo, es el club donde más estuve en toda mi carrera. Me gusta la ciudad y el club. Estamos peleando el ascenso. El año pasado estuvimos a 45 minutos de ascender y perdimos la final contra el Espanyol. Es un club muy lindo, la gente apoya siempre. La cancha siempre está llena. La familia está muy cómoda y la verdad que siento que estoy pasando un muy buen momento”.
Con 28 años, se encuentra en un momento importante de su carrera: maduro y centrado.
El fútbol de Córdoba, Belgrano, Talleres e Instituto
“Santi” se siente un cordobés más, pese a todo el tiempo que ha vivido lejos de Córdoba. Se alegra por el presente de los equipos en Liga Profesional y anhela con algún día vestir alguna camiseta.
Se confiesa hincha de River, pero no descarta un futuro jugando en el Kempes, con su familia de Ucacha en las tribunas.
“En un futuro me gustaría jugar en el país. Yo soy argentino y amo mucho mi país. En algún momento de mi carrera me gustaría. Siempre digo que River para mi sería el sueño máximo, porque hice las inferiores ahí, crecí ahí. Soy hincha. Es un sueño también mío y familiar… Sigo mucho al fútbol de Córdoba, está muy bueno que haya tres equipos en Primera y peleando. Están muy bien. Talleres está muy bien, peleando los campeonatos. Belgrano e Instituto son clubes importantes en Córdoba. Para el fútbol cordobés es muy importante. Que los chicos de los pueblos que teníamos que ir a Buenos Aires a buscar ser profesional, hoy lo tienen más cerca. Ojalá lo puedan aprovechar”, dice, mostrando estar al tanto.
Y agrega: “La vez que fui a Chateau fue para ver a River. No simpatizo por ninguno. Que los tres estén en Primera es muy lindo. ¿Si jugaría en Córdoba? Uno nunca sabe, me quedaría cerca de casa. Siempre jugué afuera y siempre pienso que uno en algún momento quiere estar cerca de casa. Sería muy lindo jugar en Córdoba. Vivirlo de cerca seria hermoso para todos”.
La selección, ese objetivo y motor
Para “Santi” Colombatto, volver a ser considerado por las selecciones nacionales es su gran motor diario, la nafta para seguir cada día.
Sabe que estando en una segunda división no será sencillo, pero para eso quiere progresar con el Oviedo español.
“Muchos de los chicos que jugué en la selección están hoy en la Scaloneta. Es muy lindo ver que les va bien, que son campeones del mundo. Uno fue parte del proceso. Siempre sueño con eso, con volver. No paro de soñar con la selección. Es lo máximo para un jugador, es lo más importante que podes anhelar. Siempre sigo soñando con esa oportunidad en un futuro… No hay nada más lindo que tener puesta la camiseta de la selección. Nada se compara con esa sensación, cantar el Himno, representar a tu país. Es hermoso. No se puede describir. Tuve la oportunidad y sueño con volver a tenerla”, completa.
Lo dice el pibe que se fue con 10 años de Ucacha. El que dejaron libre de River. Que se fue a Europa a probar suerte y terminó fichando en un club de la Serie A. Que llegó a la selección. Siempre peleando contra todo.
Por eso, no hay dudas de que Santiago Colombatto lo volverá a intentar.