No pudo ser para Boca. La séptima tendrá que esperar. La verdad es que el equipo Xeneize jugó uno de sus mejores partidos en esta Copa Libertadores. En una final apretadísima y que se definió en tiempo extra por detalles, Fluminense se impuso 2-1 en el mítico estadio Maracaná y ganó su primera Copa Libertadores.
El local se puso en ventaja en el primer tiempo gracias al gol marcado por el argentino Germán Cano en el primer tiempo. En el complemento, el peruano Luis Advíncula marcó el empate con un golazo. Tras el 1-1 en los 90 reglamentarios, “Flu” encontró en Kennedy al autor del 2-1 definitivo, que significó la máxima consagración en la historia de este club carioca.
Ambos equipos finalizaron con un jugador menos.
El Xeneize intentó por todas las vías. Fue con mucho empuje y personalidad, pero chocó con el cerrojo defensivo local, que terminó sufriendo bastante, pero le alcanzó para aguantar y festejar ante su público.
Los hinchas de Boca (se calcula que hubo unos 100 mil en Río, 22 mil de ellos dentro del estadio) alentaron todo el partido y empujaron al equipo. No fue suficiente.
El partido
Fluminense salió a buscar el dominio del partido. Boca, en tanto, a defender duro y tratar de aprovechar una contra.
La primera llegó a los 13 minutos, cuando un centro fue cabeceado por el argentino Cano, pero la pelota fue justo a donde estaba el arquero Romero.
Boca respondió a los 15 con una contra. Merentiel corrió varios metros, mientras Cavani iba por la derecha. Pero Merentiel optó por un remate desde fuera del área que controló el guardamenta carioca.
A los 17, otra para el Xeneize. Barco buscó un pase rasante y punzante que pasó entre varias piernas y llegó a Cavani, entrando al área. El oriental, en vez de seguir con la pelota, jugó hacia atrás buscando sorprender con Merentiel. Pero el intento fue defectuoso y Boca desperdició una buena chance.
Pero Germán Cano es un tremendo goleador del que disfruta Fluminense. Y a los 36 tuvo una que no desaprovechó. Vino el pase desde la derecha y entrando al área el delantero definió al palo derecho de Romero. “Chiquito” se estiró, pero no llegó y fue el 1-0.
EL COMPLEMENTO
Boca salió a buscar el empate. Tuvo dos aproximaciones interesantes. Primero con Advíncula. El peruano apareció por derecha, enganchó hacia adentro y disparó de zurda. Se fue cerca del primer palo. Después, un tiro libre ganado por Cavani a la derecha. Barco lo ejecutó y pasó por el área chica, sin que nadie pudiera conectarla.
Fluminense ya no mostró la mismo vocación ofensiva. Recién a los 23 llegó un remate de larga distancia de André, que controló abajo Romero. En la réplica, Boca tuvo la suya con un disparo de Fernández, que controló Fábio.
Pero fue Boca, empujado por su gente. Advíncula volvió a aparecer por la derecha, enganchó hacia el medio y disparó un zurdazo al segundo palo. Golazo para el 1-1, a los 28.
Pero lejos de conformarse Boca fue por más. A los 43, Merentiel se animó con un remate de larga distancia que se fue muy cerca del ángulo izquierdo de Fábio. Se salvó Fluminense.
La última fue para los brasileños. Barbosa apareció solo por izquierda y quedó cara a cara con Romero. Su disparo se fue al lado del segundo palo. La más clara de Flu en el complemento.
TIEMPO SUPLEMENTARIO
Boca parecía mejor, con Fluminense my dubitativo. Pero en la primera que tuvo el equipo carioca, facturó. Gran jugada colectiva y mejor definición de Kennedy, que la clavó contra el palo y puso el 2-1.
Por el exagerado festejo, el joven delantero de Fluminense fue expulsado. Su equipo quedó con 10 jugadores.
En el final del primer tiempo suplementario, se armó un cruce entre jugadores de ambos equipos. Por intervención del VAR, Fabbra (que le pegó un cachetazo a un rival) vio la tarjeta roja. Quedaron 10 contra 10 en el campo de juego.
Ya en la segunda parte, Benedetto por fin apareció en acción. Con un intento individual, probó con un disparo desde fuera del área, que se fue cerca del segundo palo.
Con todo Boca lanzado a la ofensiva, “Flu” apostó a la contra. A los 8, Guga apareció por el medio muy solo y definió ante la salida de Romero. La pelota pegó en el palo y luego controló “Chiquito”.
