La Gloria es toda de la Gloria. Sin dudas, es Instituto el único club que por estas horas disfruta al máximo entre los tres representantes cordobeses en la Liga Profesional de la máxima categoría del fútbol argentino.
El equipo dirigido por Daniel Oldrá dio un golpe sobre la mesa el sábado por la tarde cuando le ganó el clásico a Talleres en el Kempes luego de estar 0-1 y con un jugador menos. La alegría fue total luego de la épica victoria que quedará en la historia porque marcó la clasificación a octavos de final del Torneo Apertura.
Fue una felicidad total para el club que preside Juan Manuel_Cavagliatto, que supo reaccionar de la crisis que marcó el alejamiento de Pedro Troglio como su DT, se rearmó rápido, creyó en Oldrá y pudo cumplir el objetivo de estar entre los 16 mejores.
El logro toma más dimensión si se tiene en cuenta que sus comprovincianos Talleres y Belgrano sufrieron la decepción de quedar eliminados por anticipado y llegar a la última fecha de la fase regular sin chances de meterse en la pelea por el título.
Instituto –sus hinchas, sus directivos, sus entrenadores, sus jugadores– tiene todo el derecho de estar exultante y ahora va por más. Como lo remarcó su flamante entrenador tras ganar el sábado: “No creamos que se ganó el clásico y se terminó el año. Veremos hasta dónde llegamos”.
Más allá de su clasificación y de la legítima tremenda alegría, la campaña de la Gloria se enmarca dentro de las dificultades que también atravesaron celestes y albiazules. Que los tres cordobeses hayan visto que sus técnicos debieron irse por malos resultados es el principal indicador.
En Belgrano, se fue Walter Erviti; en Instituto lo hizo Troglio y en Talleres, primero, se marchó Alexander Medina y, el sábado, renunció Pablo Guiñazú, DT interino, en un hecho casi inédito que se vaya un conductor que estaba en esa condición.
Las campañas de los tres estuvieron lejos de ser las deseadas e imaginadas antes de comenzar el semestre y sus presidentes (Luis Artime, Juan_Manuel Cavagliatto y Andrés Fassi) lo dejaron claro cuando se hicieron cargo (antes y después), a tal punto de apostar a cambiar los entrenadores o hacer fuertes autocríticas en el final, en el caso de piratas y matadores.
La “B”, con 17 puntos, terminó 12° en la Zona A._La llegada de un referente total como_Ricardo Zielinski fue insuficiente para corregir las falencias crónicas que arrastró el equipo, en especial a la hora de defender. “Pedimos disculpas. Teníamos otras expectativas, es lo que hay”, dijo “el Ruso” tras el cierre en Santa Fe.
La Gloria, con 18 unidades, fue octavo en la Zona B, posición que le alcanzó para clasificarse a octavos y ahora irá con todo frente a Argentinos Juniors. Eso fue todo un desahogo para quienes toman las decisiones.
Talleres, con 13, finalizó 14° entre 15 equipos en la Zona B, y con una muy preocupante realidad en la tabla anual, que marca que si la temporada finalizara hoy la “T” se iría al descenso.
Una situación impensada dentro de una gestión como la de Fassi en la cual hay muchas más buenas que malas, a tal punto que hace apenas dos meses ganó la Supercopa Internacional, primer título en Primera División para el club de barrio Jardín.
Llegarán tiempos de autocrítica y balances respecto a la competencia local, donde el fútbol cordobés sueña con verlos a los tres mucho más arriba y con más protagonismo.