Preocupación. Eso es lo que reflejan los rostros de los hinchas de Instituto en estos momentos. Y motivos no faltan: tras la increíble derrota frente a Atlético de Tucumán el equipo quedó a tres puntos de la zona de descenso y dejó pasar otra buena chance de meterse entre los ocho de su grupo que se meterán en los playoffs.
Pero al margen de lo numérico, que incluye una fatídica racha de 14 partidos sin triunfos en calidad de visitante, la mayor preocupación va atada al pobre rendimiento futbolístico que la Gloria ha mostrado a lo largo del año.
Las recientes victorias ante San Martín de San Juan (el último en todas las tablas) y frente a Deportivo Madryn (equipo de mitad de tabla en Primera Nacional) en Copa Argentina le dieron un poco de aire a un Pedro Troglio que en estos primeros 100 días frente del Albirrojo sigue sin encontrarle la vuelta.
El propio DT dejó en claro que por una cuestión presupuestaria hoy no cuenta dentro del plantel con jugadores de la jerarquía necesaria como para pelear arriba. Pero también es cierto que con lo tiene se esperaba que el equipo sume al menos cuatro o cinco puntos más de los que hoy cosechó.
Y si bien de local el equipo ha mostrado otra cara, sus últimas dos salidas fueron por demás preocupantes: sufrió cuatro goles ante Lanús y tres anoche. Teniendo en cuenta que en los otros diez partidos del campeonato había recibido apenas ocho goles, esa cifra actual es cuanto menos alarmante.
Por otra parte, también preocupa en Alta Córdoba el bajo rendimiento individual de muchos jugadores. Exceptuando a Manuel Roffo, Alex Luna y algunos juveniles, el resto no viene aprobando los exámenes en su gran mayoría.
Damián Puebla sigue lejos del nivel del año pasado. Elías Pereyra pudo ser expulsado en el primer tiempo por faltas innecesarias en campo rival y debió ser reemplazado en el entretiempo porque estaba al borde de la roja. Su reemplazante Lucas Rodríguez no entró bien y encima facilitó el tercer gol del “Decano”. Silvio Romero casi no juega y cuando ha ingresado tampoco fue solución. Y la lista podría seguir con muchos nombres más que no le han aportado a Instituto lo que hoy necesita.
Y como si fuera poco, el delantero por el que se apostó se rompió los ligamentos. Facundo Suárez sufrió una grave lesión y estará casi todo el año lejos de las canchas. Se buscó un reemplazante contrarreloj y de momento lo de Nicolás Cordero no ha sido una solución en materia de lo que más se le pide a un 9: goles.
Además, en Tucumán se volvieron a cometer errores defensivos infantiles que costaron caro. Y como en muchas otras ocasiones, el equipo “regaló un tiempo” y tardó más de 45 minutos en generar acciones de riesgo en el arco rival.
“Yo hay tres o cuatro veces año que me puedo ir enojado de una cancha. Con Lanús fue una de esas”, había dicho días atrás Troglio durante su visita al podcast Mundo Gloria. Y muy probablemente este lunes le pasó algo similar en cancha de Atlético.
De todos modos, puertas afuera el DT envió un mensaje en el que hizo hincapié en que “hubo una desgracia en el minuto final” y que por eso se perdió. Pero al margen de eso, su equipo marcó mal durante gran parte de la noche. Sufrió tres goles y Roffo salvó un par más.
“Lamentablemente le quedó servida y fue gol. No hay nada para reprochar al equipo. Parecía que íbamos a ganar nosotros. El fútbol tiene estas cosas y hay que aceptarlas. El segundo tiempo fue muy bueno, jugamos mejor y merecimos empatar y darlo vuelta. Esto tiene el fútbol: hay que meterla. Ellos la metieron en el final y no hay mucho por analizar”, dijo Troglio en Tucumán.
Al torneo le restan apenas cuatro fechas para llegar a su final y salvo que de local el equipo no levante, es probable que la dirigencia respalde a este cuerpo técnico antes de analizar algún posible movimiento en ese sentido.
“A mí nadie me dio un ultimátum que si hoy perdía, me iba”, contó Troglio a pocas horas del partido con San Martín de San Juan.
Lo cierto es que desde la dirigencia entendían que si no se ganaba ese encuentro el ciclo podía llegar anticipadamente a su fin.
Por lo pronto ahora la Gloria tiene que recibir a Riestra este domingo a las 15.30 y luego visitar a Rosario Central el domingo siguiente desde las 20.30.
Y cerrará el campeonato recibiendo a Sarmiento de Junín y luego visitando a Talleres en el clásico en el Kempes.