Luego de la ajustada victoria de Vélez ante Midland por la primera ronda de la Copa Argentina, Sebastián Domínguez brindó su análisis en conferencia de prensa. En el Estadio Ciudad de Vicente López, el “Fortín” logró imponerse por la mínima ante el conjunto de la Primera B, gracias a un penal convertido por Braian Romero a los 77 minutos. Con este gol, el equipo cortó una histórica sequía sin anotar y aseguró su pase a los 16avos de final, donde enfrentará a Lanús.
Una vez finalizado el encuentro, el DT de Vélez describió el partido como “un partido complicado, como siempre es en Copa Argentina. Ayer Estudiantes lo tuvo en cancha de Unión”.
Sobre el planteo de Midland y las dificultades que tuvo su equipo, Domínguez reconoció: “Midland fue un rival que nos costó mucho, es mucho mérito de ellos. Creo que en los momentos que titubeamos o no fuimos claros para elegir la mejor opción para jugar, tuvo opciones el rival. Queda la imagen de un partido más complicado de lo que termina siendo para Vélez”.
El entrenador también hizo autocrítica sobre el rendimiento de su equipo y la tensión que se vive en este momento: “Hoy nos complicamos solos, y tuvimos en los últimos 20 minutos situaciones de riesgo completamente evitables”. Y agregó: “Nosotros les damos herramientas a los jugadores, después es decisión de ellos. Después hay un nerviosismo dentro y fuera de la cancha por el momento que venimos pasando, que se transmite al jugador y hace que nos equivoquemos más de la cuenta”.
A pesar de las críticas y la falta de resultados, Domínguez defendió el trabajo del equipo: “Creo que todos compartimos de que si vemos los últimos partidos de Vélez, sobre todo jugando de local, hemos hecho muchísimo más que varios rivales y no nos hemos llevado lo que merecemos”.
El gesto de Romero: un abrazo con mensaje
La victoria ante Midland significó mucho más que un simple pase de ronda. Vélez arrastraba una sequía goleadora de 847 minutos, la más extensa de su historia desde aquella final con Huracán en la que se consagró campeón de la Liga Profesional. Con Domínguez en el ojo de la tormenta por acumular siete partidos sin ganar ni marcar goles, el penal convertido por Braian Romero fue un alivio en medio de la tormenta.
Para Romero, el gol también fue un desahogo personal: llevaba 15 partidos sin convertir, un registro inusual para quien fuera el goleador del equipo de Gustavo Quinteros y que, por un tanto, no quedó como el máximo artillero del torneo pasado. Su último festejo había sido, también de penal, en el 1-1 ante Deportivo Riestra el 11 de noviembre, en el recordado debut del influencer Spreen.
El delantero, que comenzó el partido en el banco, no dudó en tomar la pelota cuando se sancionó el penal, pese a que Michael Santos también quería ejecutarlo. Finalmente, el uruguayo cedió el remate a Romero, quien explicó después en diálogo con TyC Sports los detalles de esa conversación.
El disparo no fue el más limpio, pasó por debajo del cuerpo de Lautaro Maldonado, pero igual se transformó en gol. Tras el festejo con sus compañeros, Romero corrió directo al banco de suplentes y abrazó a Domínguez, quien lo recibió con un gesto más serio que eufórico. El entrenador sabe que, pese al triunfo, el equipo sigue en deuda desde lo futbolístico y que el margen de error se achica cada vez más.
