El estadio Kempes volvió anoche a ser protagonista de otro partido definitorio, esta vez, la semifinal de Copa Argentina entre Boca y Vélez. La lluviosa tarde noche cordobesa no privó a los hinchas de copar las ubicaciones disponibles. El puntero del fútbol argentino jugaba ante un Xeneize que con Gago empezaba a encontrar victorias. La previa había estado caliente, sobre todo porque desde Fortín se quejaron por la elección de la fecha, en medio de la definición de la Liga Profesional.
En un partido increíble, con todos los condimentos, Vélez se lo llevó 4 a 3. Pizzini, Figal en contra y dos de Bouzat le dieron el triunfo a Vélez. Cavani, Zeballos y Belmonte habían aliementado la ilusión de Boca. Ahora el Fortín será rival de Central Córdoba en la final, en día y sede a definer. Además, buscará el título local, donde pelea, entre otros, con Talleres.
El partido arrancó con presión y contrapresión. La cancha rápida le daba Buena intensidad al juego. Fue Boca el que aviso primero, pero Vélez pegó en la primera que tuvo. El ex-Talleres Francisco Pizzini capturó un pase dentro del área y anotó el 1 a 0, a los seis minutos. Antes, Brey había tapado un mano a mano muy bueno.
Con el resultado a favor y la inyección de confianza, Vélez empezó a manejar el juego, con un Aquino impeccable y mucha circulación. En Boca todo se hacía más engorroso, los centrales la tenían mucho y el medio no aportaba juego. Le mejor venía de alguna recuperación alta.
Pero el Fortín sabía cómo y cuándo responder. Un pase profundo a Pellegrino derive en un centro que Nicolás Figal quiso despejar y la terminó poniendo arriba, lejos de las chances de Brey para sacarla. En 20 minutos, el líder de la Liga Profesional pisaba fuerte en el Kempes. El “Movete, Boca, movete”, empezó a sonar temprano en las tribunas.
Gago movió las piezas buscando sacudir al equipo, metiendo a Milton Giménez en lugar de Miramón, con Zenon bajando al mediocampo y cumpliendo una doble función en la creación y recuperación. Vélez estaba tranquilo y controlaba los tiempos con posesiones largas, fiel al estilo del 2024.
Boca, a pesar de estar partido y sin ideas, se aprovechó de que su rival estaba refugiado para descontar sobre el cierre del primer tiempo. Saracchi encontró a Cavani en una conexión uruguaya que le daba esperanzas al Xeneize.
En el segundo tiempo, Avíncula vio la roja tras una patada, luego de haberse salvado de la expulsion en la última jugada de la primera parte. Cuando Boca había hecho lo más difícil, el peruano dejó a su equipo con diez y todo se volvió cuesta arriba.
El cordobés Barinaga entró por Zenon para rearmar la defense. Quinteros mandó al campo a dos titulares como Bouzat y Fernández, buscando cambiarle la cara al Fortín.
Con diez, Boca no se rendía, seguía intentando y encontró su premio. Una gran salida rápida y una Buena jugada de Zeballos le dieron el 2 a 2 a los 25 minutos. Y no se quedó ahí. A los 34 minutos, de una segunda jugada, llegó la asistencia de Barinaga para Belmote y el impensado 3 a 2. Y en un partido de locos, Vélez encontró el empate cuando Boca ya se defendía con cinco. Bouzat, ex-Boca, volvió a aparecer para darle el triunfo al Fortín.
Inolvidable semifinal de Copa Argentina que el conjunto de Liniers se llevó en Córdoba.