Fue una fiesta inolvidable para todos en Talleres lo que se vivió este jueves en la celebración del título de la Supercopa Internacional en el estadio Mario Kempes.
Los jugadores recibieron la ovación de toda la gente del Matador, en una velada que quedará grabada a fuego.
Todos ellos filmaron con sus celulares el recibimiento que les dieron.
Luego, alzaron la copa obtenida en Paraguay ante River.
“Desde un principio sabía que iba a patear ahí (por su penal). Mi hijo Mateo vino con el título bajo el brazo. Se lo agradezco a la gente que estuvo en los malos momentos y la gente que siempre nos apoya”, expresó Gastón Benavídez, tras escuchar su gol relatado por el “Bocha” Houriet por los parlantes del Kempes.
Luego fue el turno de un símbolo de la institución como el arquero Guido Herrera.
“Quiero saludar a todos, decirles que disfruten. Sé realmente lo que se sufre, lo que se ansiaba esto. No es para nada fácil. Sean muy felices con los suyos. Esto es una alegría enorme, fue sacarnos una mochila enorme. Fue romper una pared. Lo que vendrá será gigante, porque laburamos para eso”, expresó el capitán Guido Herrera



Finalmente, le tocó hablar al paraguayo Matías Galarza Fonda.
“Estoy feliz de compartir con toda esta hinchada increíble. Ver esa imagen de 10 mil personas en el centro fue una locura. Estoy agradecido eternamente”, expresó Matías Galarza Fonda.
Luego, levantaron la copa y celebraron con la popular Willington, para dar la vuelta olímpica.