“Somos el equipo que más goles tiene, pero también el de que más situaciones crea...”. La expresión es de Walter Ribonetto, el DT de un Talleres que con el 4 a 1 a Atlético Tucumán, pasó a ser directamente el de más conversiones de toda la Copa de la Liga Profesional, con 20 tantos, un valor superior al de River (18), Argentinos (17), Vélez (12), Independiente (10), con quienes lidera la Zona A y mejor que Lanús (16 tantos), el de más conversiones en la Zona B.
También hay que decir que así como la “T” hace dos goles por juego, su valla cayó 13 veces en estas 10 fechas por mérito del rival y errores propios.
Sin embargo, en el análisis del Talleres goleador, hay que destacar un punto fuerte. Recién ahora, el primer equipo parece haber encontrado el “9″ que estaba necesitando.
La noticia de la goleada al “Decano” la dio Federico Girotti: hizo tres tantos, en área chica o bien cerca; de rebotero, como receptor de un córner o de un centro atrás.
Se valora mucho que “el Tanque” (10 partidos, 4 goles) vaya hacia los costados para sacar a los centrales o para recibir y esperar la llegada de Rubén Botta, Ramón Sosa o de los volantes más cercanos o de un lateral, pero volver al área para poder definir es un paso que no le ha salido tanto.
Es más, varias veces el paraguayo ha puesto una asistencia en puerta de área o al punto del penal, sin que esté el propio Girotti, o Nahuel Bustos o Gustavo Bou, que han sido alternativas. Muchas veces, el propio Botta marca los pases sin que exista la lectura correspondiente o ha sido él mismo quien viajó hacia ese lugar como en el 1-0 a Rosario Central.
El otro punto es lo que Talleres erra. Ante Atlético Tucumán, Talleres hizo cuatro goles, pero generó alrededor de 10 arribos netos. Tres de ellas estuvieron a cargo de Bustos, quien ingresó en el segundo tiempo cuando faltaban 20 minutos. Valentín Depietri los asistió dos veces, en la primera la pelota fue al lado del palo y en la segunda quiso enganchar antes que pegarle de primera. En la última, recibió de Marcos Portilla y su remate cruzado fue anunciado, lo que permitió que José Devecchi la sacara. Eso sin contar el tiro libre que dio en la barrera.
No es que Bustos fue el único en errar ya que también lo hizo Ramón Sosa (cuatro clarísimas), Botta (dos) y hasta Juan Camilo Portilla. Sin embargo, la expectativa es porque “NB10″ mejore y eleve ese registro de un gol y una asistencia que tiene, de cara al inicio de la triple competencia. Talleres jugará este jueves antes Agropecuario por 32 avos de final de la Copa Argentina, jugará el domingo ante Banfield por la Copa de la Liga Profesional, tras el parate de fecha Fifa recibirá a Vélez el 31/3 y ya en abril largará la Copa Libertadores.
Mientras tanto, “Rulo” logró jugar 18 minutos ante Central y nada más.
A comienzo de torneo había seis “9″: Tomás Molina se marchó a Central Córdoba y Francisco Pozzo está en reserva “T”.
Lo que viene
Los tres goles de Girotti llegaron cuando el DT ya había probado con todos los “9″ con un producido de apenas tres goles entre todos. Talleres necesita más de Bou, Bustos y de Girotti. En la foto de los festejos, el foco está en Fede y se requiera que ingresen los otros “9″.
Talleres debe tener más gol porque así como hace dos por partido, genera situaciones por el doble o el triple. Por juego o individualidades, el equipo de Ribonetto llega mucho, pero necesita ser más efectivo. Sobre todo, porque empezarán a llegar los cotejos eliminatorios.
El primero de ellos será este jueves, en cancha de Quilmes, ante Agropecuario.
