Sebastián Driussi encendió las alarmas en River y los estudios médicos confirmaron lo peor: esguince severo del ligamento interno del tobillo izquierdo, una lesión que lo dejará fuera del resto del Mundial de Clubes y lo mantendrá inactivo entre uno y dos meses.
El delantero, autor del segundo gol en el triunfo ante Urawa Red Diamonds, no pudo ni celebrar su conquista. En la acción del tanto, recibió un golpe en la cabeza por parte del arquero rival, lo que provocó una caída desafortunada sobre su pierna izquierda. El impacto fue tal que pidió el cambio de inmediato, visiblemente afectado y con una frase que reflejó su preocupación: “Me rompí todo”. Luego, abandonó el estadio en muletas y con evidentes gestos de dolor.
Con este diagnóstico, Driussi apunta a volver en óptimas condiciones para la ida de los octavos de final de la Copa Libertadores, prevista para el 14 de agosto ante Libertad, en Asunción.
Una baja sensible para Gallardo
Hasta el momento de la lesión, el atacante de 29 años venía siendo una de las figuras del equipo. Había mostrado su potencia en el primer tiempo con un zurdazo que dio en el palo y selló su gran actuación con un cabezazo letal en el complemento. Su sociedad con Facundo Colidio, con quien compartía siete goles en el año, había revitalizado el ataque millonario.
Ahora, Marcelo Gallardo deberá rearmar el rompecabezas ofensivo. En el propio encuentro, el DT optó por el ingreso de Miguel Borja, quien, aunque con menos movilidad, ofrece potencia y presencia en el área. El colombiano suma seis goles en 26 partidos este semestre, pese a haber sido titular en apenas 10 ocasiones.
Otra opción que baraja el entrenador es modificar el esquema: reforzar el mediocampo y dejar a Colidio como único delantero más centralizado. En ese caso, los nombres que podrían ingresar son Maximiliano Meza, Gonzalo “Pity” Martínez, Manuel Lanzini o Matías Rojas, todos con perfil ofensivo y experiencia.
Un golpe para River en medio del objetivo internacional
La lesión de Driussi llega en un momento clave, justo cuando River comenzaba a ilusionarse con su rendimiento internacional. Su ausencia obliga al equipo a ajustar el plan en plena competencia, con el objetivo de mantenerse competitivo en el Mundial de Clubes y llegar en plenitud a la Copa Libertadores.