El femenino de Belgrano comenzó en 2025 una nueva etapa, en su tercer año como equipo de la máxima categoría. Tras la salida de Maximiliano Luján como DT, llegó el turno para una exjugadora histórica, Mariana Sánchez.
Representante del ADN de Belgrano en todos lados, “Pomu” pasó de manera muy rápida del lugar de jugadora al de entrenadora. Apenas seis meses después de colgar los botines, de manera silenciosa y tras un breve paso por Brasil, la exdefensora tendrá su primera experiencia como jefa de grupo y ante quienes fueron sus compañeras.
“Me gustaría agradecer a la comisión directiva que confió en mí, no solo como jugadora, sino ahora como DT, que siempre me apoyó y que me revaloriza, como te digo, no como jugadora, sino como una persona que ama mucho este club. Y ahora, como entrenadora, darme la oportunidad”, le dijo Sánchez a La Voz.
El desafío arranca el 2 de febrero, cuando dé comienzo el primer torneo del año. También tendrá la Copa Federal, que se jugará en el parate de fecha Fifa en febrero. “Pomu” espera darle su impronta al equipo, potenciar las virtudes y respetar el ADN pirata que ella conoce de pies a cabeza.
En una nota mano a mano con La Voz, Sánchez habla de cómo se preparó para ser hoy la entrenadora principal de Belgrano, qué equipo espera formar y lo que espera del clásico con Talleres.
–¿Cómo estás viviendo estos primeros días de pretemporada en este nuevo rol?
–La verdad que muy contenta, muy feliz con el desafío. La recepción del grupo fue muy buena, con muchas ganas, con nuevas energías. Tuvieron un buen descanso, pudieron pasar las fiestas con sus familias. Así que la energía con la que nos recibieron al nuevo cuerpo técnico fue muy buena. Esta primera semana de adaptación realmente fue muy intensa, muy linda, comprometidas todas. Las jugadoras estuvieron trabajando en una planificación que les había dejado la PF y la verdad que fueron muy comprometidas y todas llegaron muy bien. Pudimos tener una semanita, a pesar de ser de adaptación, con una buena intensidad, que es lo que queríamos.
–¿Cómo se dio este vuelco de pasar de ser jugadora a pensar como entrenadora?
–Me venía preparando, hice el curso, me recibí. En estos últimos meses como coordinadora ya venía agarrando grupos de diferentes categorías. Sinceramente, ya venía mostrando un poco mi perfil, cómo me gustaba jugar, pensando los partidos. Cada vez agarraba más categorías: un día estaba con la reserva, con la sub-16, analizaba, miraba. Como coordinadora, tenés que pensar en el perfil de jugadoras para todo el club y, por supuesto, para cada categoría, qué ver, qué mejorar. Fue todo un proceso. Primero, dejar de verme como jugadora y empezar a verme como entrenadora. Creo que mi paso por Brasil fue mi momento para despedirme, para hacer mi duelo como jugadora, que creo que todo jugador y jugadora lo tiene. Ahí fue el puntapié para empezar a migrarme como DT y a capacitarme, sobre todo a generar un proceso de aprendizaje en la planificación. El arte de planificar es lo que te da personalidad y lo que te construye tu modelo de juego. La filosofía de Belgrano por supuesto que la tengo adentro de mi ADN por tantos años en el club. Después, también fue importante para mí conocer a las jugadoras, conocer todo el potencial que tienen. Soy bien consciente de lo que significa este desafío porque primero soy de las personas que más ama a Belgrano y que mejor quiere que nos vaya, que el fútbol femenino crezca y siga creciendo, sobre todo en esta etapa de fútbol profesional donde se ve la calidad de equipo que tenemos y todo el compromiso que el club tiene para que sigamos creciendo.
–¿Cómo fue la propuesta del club?
–Me lo propusieron por parte del club. Creo que fueron varios condimentos: el hecho de haberme preparado, de haberme capacitado, de demostrar capacidad en los últimos meses en la coordinación, más esto más conocer el ADN de Belgrano. Creo que eso es un punto muy importante, no solo de los equipos, sino también de todo el club. Y bueno, yo creo que también el modelo de conducción fue uno de los parámetros que la gente vio en mí para decidir proponérmelo.
–¿Cuánto hay del ADN de Belgrano y cuánto de tu impronta en tu modelo de juego? ¿Cómo vamos a encontrar a este Belgrano?
–Vamos a encontrar a un Belgrano mucho más protagonista, que va a buscar generar mucho más juego asociado. Por supuesto, confiamos en la calidad de nuestras jugadoras y en la jerarquía. Así que vamos a ir por todo. Los objetivos son los más altos. Sabemos a lo que vamos, qué es lo que buscamos y, sobre todo, sabemos que tenemos con qué hacerlo. Vamos a buscar un Belgrano con mayor protagonismo.
–En estos dos años en primera, Belgrano se vio como un equipo muy físico, intenso, de transiciones rápidas. ¿Se va a mantener eso o vas a buscar más dominio con la posesión?
–Nosotros creemos con el cuerpo técnico que tenemos jugadoras polifuncionales, jugadoras que, como lo dijiste vos, físicamente están muy bien, que creo que en estos años de fútbol profesional, sumando la categoría del ascenso, las jugadoras han desarrollado en cuanto a sus capacidades fisiológicas un nivel muy alto, creo que de los mejores de fútbol argentino. En función de saber que tenemos potenciado eso, que hemos en estos años creado un buen ataque directo, buenas transiciones rápidas, vamos a mejorar el juego asociativo. Al mejorar esto, vamos a buscar un Belgrano mucho más protagonista con la pelota.
–¿Cómo fue esa primera charla con las jugadoras?
–Me preparé mucho durante el receso. Tuve muchas charlas con los coordinadores, con Enrique Borreli y con Rubén Olivera, quienes me acompañaron, me ayudaron, me aconsejaron, están ahí siempre para orientarme en este nuevo rol. Generamos una presentación bastante didáctica, audiovisual, para que las jugadoras pudieran además de escucharme, poder visualizar sobre todo cuestiones que tienen que ver con presentarnos a todo el cuerpo técnico, cuáles son los valores que van a prevalecer. Un poco del modelo de juego también, por supuesto que eso se va trabajando, lo vamos a trabajar durante toda la pretemporada y todo el año, pero es bueno que la jugadora se vea con el nivel de profesionalismo que hay que tener en este Belgrano tan importante. La recepción fue muy buena. Yo conozco a las jugadoras, he sido compañera de la mayoría de ellas. Fue muy buena, muy productiva, muy emocionante. Yo estaba a la espera de cómo me iba a sentir, cómo me iban a encontrar las jugadoras y sinceramente todo el apoyo de ellas. Fue una buena charla, una buena recibida.
–¿Cómo está compuesto tu cuerpo técnico?
–Se mantiene Milagros Fernández en la parte de preparación física. Mayira Aguirre, que también es histórica del fútbol femenino, va a tomar más protagonismo, viene como ayudante de campo. Tenemos un ayudante de campo también nuevo, Franco Hita, exjugador de fútbol profesional, también entrenador recibido. Él va a ser el ayudante de campo número uno. Tiene mucha experiencia como jugador profesional. Va a aportar mucho porque también él ha sido delantero toda su vida. Después, vamos a tener una colaboración extra con videoanálisis. Y, por supuesto, continúa Eric, el entrenador de arqueras.
–¿Qué tipo de jugadoras estás buscando para reforzar el equipo?
–Si te soy sincera, tenemos un equipo supercompleto. Sinceramente, jugadoras que tienen muchísima jerarquía, que tienen mucha experiencia; otras que no tanto, pero que tienen un potencial terrible. Vamos a reforzar algunos puestos puntuales, obviamente la arquera, también en defensa. No vamos a traer muchísimos más refuerzos, seguramente una volante. Vamos a tratar de traer un refuerzo por línea para jerarquizar aún más el plantel.
–¿Qué características buscás en esos refuerzos?
–En cuanto a la arquera, por supuesto que una arquera de mucha jerarquía, como la que teníamos. Después, una defensora central por izquierda, también de jerarquía, que tenga buen juego aéreo. Una volante de mucha movilidad. En cuanto a la delantera, también una delantera con buen juego aéreo, con potencia. Esos son los puntos más importantes para nosotros en cuanto a los refuerzos. Y, por supuesto, que sus capacidades fisiológicas estén adaptadas a nuestro equipo, que es bastante intenso.
–En estos dos años de Primera División, a Belgrano le costó la promoción de juveniles. ¿Es una cuenta pendiente?
–Siempre es una felicidad poder promover jugadoras, tenerlas en el plantel y que crezcan, que puedan tener su oportunidad. Es uno de los objetivos principales. Pero sabemos que Belgrano aspira a objetivos altos, importantes. Entonces, por ahí años anteriores, el tema de poder darle más minutos a las jugadoras que se promueven se torna más complejo, porque la competencia es muy alta. Este año es un objetivo poder sumarlas en más minutos y que se afiancen en Primera División.
–Este año tendrás el clásico como entrenadora. ¿Cómo te imaginás ese partido?
–Emoción, emoción pura. Sinceramente, vamos a prepararnos de la mejor manera para ese partido y jugarlo con la seriedad que tiene. Va a ser totalmente histórico. Vamos a trabajar mucho y va a ser muy especial, por supuesto.