Michael Santos se llevó la pelota y la ilusión del Mundo Talleres. Los tres goles que marcó y que sirvieron para vencer 3-2 a Atlético Tucumán terminaron siendo “la” noticia de la recuperación de un equipo que sigue estando entre los clasificados de la Zona B de la Copa de la Liga Profesional y que se apresta a continuar su desafío en la Copa Sudamericana ante Deportes Tolima, el miércoles a las 21.30, y tras haber perdido en el debut con Emelec.
Quedó claro lo que significó para Talleres el triunfo en el Monumental José Fierro, pero también qué representó para Santos. Fueron nada más y nada menos que un privilegio que nadie vivió en la era del Alexander “Cacique” Medina y la chapa que podrá sacar cada vez que le pregunten qué hizo en su paso por el Mundo Talleres. Desde el primero hasta el último de sus habitantes espera que haya sido un antes y un después, sobre todo para el reto de sumar al protagonismo que el primer equipo albiazul quiere demostrar en la triple competencia que conforman la Copa de la Liga Profesional, la Copa Sudamericana y la Copa Argentina.
La noche del domingo fue el momento en que cobró vigencia ese deseo que tenía “el Cacique” desde que puso un pie en Talleres. Michael o “Maikol”, según su propia definición sobre el nombre de pila, marcó los tres goles del equipo. El primero fue el 1-1 y de “vivo” porque aprovechó un quedo de Risso Patrón y de Ortiz, que el uruguayo leyó bárbaro y así se fue de cara Luchetti para vencerlo sin problemas. Como resultó el empate parcial, terminó levantando al equipo que había arrancado perdiendo con el gol de Ramiro Ruiz Rodríguez, en el amanecer del juego.
El segundo fue de un Santos de calidad: recibió de Retegui, le mató el efecto a la pelota y remató con gran potencia para vencer a Luchetti, nuevamente, lo que permitió que Talleres revirtiera el 0-1 inicial.
Con el 2-1, Talleres se envalentonó y, Santos, aún más. El 3-1 llegó con el uruguayo en modo rebotero. Federico Navarro había ingresado hacía minutos por José Mauri (tuvo su debut en esta temporada tras llegar como refuerzo al equipó albiazul) y se adelantó hasta la puerta del área tucumana. Su tiro no pudo ser contenido por el arquero de Atlético, lo que fue aprovechado por Santos para marcar su tercer tanto.
Minutos después, vino el descuento de Gustavo Ortiz y un poco de sufrimiento para Talleres, pero el marcador ya no se movió. Había sido la noche de las mejores versiones que Santos había tenido en Talleres.
Casi se lo pierde
“Se me abrió el arco. Gracias a mis compañeros por el esfuerzo que hicimos. A mi mujer y también a Guilherme Parede, que está pasando un mal momento. Este Talleres es un equipo corto y Medina decidió rotar. Entramos bien. Vinimos a buscar los tres puntos. Ahora, viene el viaje a Colombia”, dijo Santos, apenas terminado el juego en el Monumental José Fierro.
Lo cierto es que Santos bien pudo haberse perdido una gran noche, ya que minutos antes del encuentro frente a Atlético Tucumán fue probado en el mismo campo de juego.
Durante un rato se lo vio trotar y ser exigido por los auxiliares del entrenador Alexander Medina por una molestia muscular.
“Fue así. Lo probamos antes de empezar. La responsabilidad es de los jugadores cuando entran a la cancha. No hay excusas posibles, cuando eso sucede. Así nos manejamos en Talleres. Santos fue probado y respondió bien. Por eso pudimos ver un jugador de jerarquía que nos mostró todo su potencial en un partido importante”, comentó Medina, en la conferencia de prensa pos partido en el Monumental José Fierro.
Medina había querido traer a Santos desde que llegó a Talleres en 2019 y recién en el último mercado de pases logró que llegara, aunque con una importante inactividad. En Tucumán pudo verse a ese delantero que tanto estaba buscando Talleres. Se espera que sigan más noches como la de Tucumán.
