A casi 14 años de la histórica pérdida de categoría de River Plate ante Belgrano en 2011, el exárbitro Sergio Pezzotta volvió a referirse a aquel encuentro que marcó un antes y un después en su carrera y en la memoria de los hinchas.
En diálogo con Ovación del diario La Capital de Rosario, Pezzotta rememoró aquel fatídico 26 de junio en el Monumental.
“Tengo la conciencia tranquila. Me equivoqué como se equivocan todos”, sostuvo Pezzotta, aunque admitió que es un tema que no le gusta tocar porque le trae malos recuerdos a su familia.
“La pasó mal”, confesó, recordando incluso que debieron irse de su casa por versiones de posibles represalias.
Pese a las críticas que aún persisten, el exárbitro se mantiene firme: “Me quieren encontrar un muerto en el placard y no me lo van a encontrar. ¿Sabés por qué? Porque nunca lo tuve”.
Pezzotta reveló que nunca más vio el partido y que, ante la presión y los rumores de sobornos (“una valija que no llegó, una mexicaneada”), se pregunta cómo habría podido seguir dirigiendo hasta 2017 si algo de eso fuera cierto.
“Hay periodistas que son hinchas, entonces tiran cualquier bolazo para levantar el rating”, sentenció.
El exárbitro recordó que en la previa le sugirieron no dirigir ese encuentro, pero como empleado de la AFA sintió que debía hacerlo.
También confirmó el ingreso de barras al vestuario y la difícil decisión de continuar el partido ante la falta de garantías de seguridad.
“Optamos por seguirlo. Creo que actuamos fríamente y los encargados del operativo de seguridad nos dieron las garantías necesarias”, explicó.
Pezzotta lamentó haberse equivocado en esa jugada puntual, pero destacó que siempre dio la cara en un momento donde otros no lo hicieron.
“El único que estaba en ese momento para ir a poner el pecho era yo, no había otro. Porque a uno le dolía el pelo, al otro le dolía la muela...”, ironizó.