Talleres mostró anoche sus intenciones. Fue a Paraguay a exhibir que el camino por el que apuesta para lograr su recuperación tiene que ser con la pelota, siendo protagonista en la cancha que sea.
Lo intentó frente Libertad, de visitante en el estadio La Huerta de Asunción del Paraguay, por la segunda fecha del Grupo D de la Copa Libertadores 2025. Pero le sigue faltando algo vital: el gol.
Anoche, el dueño de casa fue un culto a la eficacia. Su brillante momento estadístico marca que ganó sus dos partidos en esta Libertadores (1-0 a Alianza, en Lima por la primera fecha, y 2-0 anoche sobre la “T”), a lo que suma su invicto de 12 partidos en el torneo local, que lo tiene como cómodo puntero.
A Libertad le salió todo bien. Pegó en los momentos justos, cuando Talleres se sentía dueño de las acciones. Después, el Albinegro se abroqueló atrás de manera tal que Talleres casi que no lo pudo sorprender.
Recién en la parte final del partido, con los ingresos de Depietri y Palacios, más la presencia en el área de Girotti, tuvo sus chances más claras, pero se topó con la firmeza de Morínigo. Sacando a “Bebelo”, quien fue el que más intentó, lo mejor del Matador vino desde el banco.
La apuesta visitante fue tener la pelota. Y la tuvo la inmensa mayoría del partido. Pero pecó de falta de profundidad y de ideas. Libertad fue siempre un equipo corto, una especie de bandoneón, que se achicaba en la distancia entre sus líneas, cuando defendía, y se expandía a pura potencia y velocidad, cuando atacaba.
Los paraguayos son un fiel reflejo de la tradición futbolística de este país: rocoso, firme, duro, que tiene en el contacto físico una razón de ser y de imponer. Pero también es un equipo utilitario que tiene en claro el libreto que debe representar. Y anoche lo hizo muy bien.
Talleres, por cómo lo intentó, mereció al menos el descuento. Pero se fue con algunas buenas señales futbolísticas en las que debe apuntalarse para seguir trabajando.
Libertad era un rival muy duro de antemano y anoche eso quedó demostrado. Pero, al margen de las virtudes del equipo de Asunción, Talleres se lleva aspectos en el debe y en el haber, más una certeza: mucho trabajo por delante.
Habrá que ver cómo impacta el resultado en el apuro de los dirigentes por definir al entrenador. El interinato del “Cholo” tiene un triunfo y una derrota. Los buenos resultados ayudan y potencian. Los otros generan dudas.