Miguel Puebla tuvo un domingo soñado. El delantero de Amsurrbac fue la gran figura de la cuarta fecha del Torneo Regional Amateur al convertir tres goles en la goleada por 7 a 0 ante Obras Sanitarias de Mina Clavero, resultado que consolida al equipo cordobés en lo más alto de la Zona 5 de la Región Centro.
Como manda la tradición futbolera, Puebla se llevó la pelota a casa, un premio simbólico pero especial para quienes logran un triplete.
“El otro Puebla”, como lo conocen algunos, atraviesa un presente brillante en la Primera A de la Liga Cordobesa de Fútbol y en el Regional.

Los goles y el contexto
Los siete tantos de Amsurrbac fueron convertidos por Miguel Puebla (por tres), Mateo Morello, Jeremías Montivero, Facundo Sánchez y Maximiliano Villa.
Con esta victoria, el equipo suma 9 puntos y lidera su zona, seguido por Sarmiento y Comercio (4) y Obras Sanitarias (3).
Así quedaron las tablas de las zonas donde participan clubes cordobeses tras la cuarta fecha del torneo:
- Zona 4: General Paz Juniors 8; Newell’s 5; Flor de Ceibo 5; Quilmes 2.
- Zona 5: Amsurrbac 9; Sarmiento 4; Comercio 4; Obras Sanitarias 3.
- Zona 6: Universitario 10; Colón 10; Bochas 3; Ilusión del Norte 3.
- Zona 7: Talleres de Berrotarán 8; Belgrano de Berrotarán 7; Vélez 4; Renato Cesarini 3.
- Zona 8: Huracán 6; Sarmiento (Pueblo Italiano), Argentino (Marcos Juárez) y Sarmiento (Etruria), 5.
- Zona 9: 9 de Julio (Morteros) 10; Argentino (Bell Ville) 7; Recreativo (Laborde) 6; Matienzo (Monte Buey) 0.
Los dos primeros de cada zona avanzan a los 16avos de final de la Región Centro.

Una historia de esfuerzo y fútbol en familia
Miguel Puebla tiene 25 años y es tres años mayor que su hermano Damián, actual jugador de Instituto. Ambos crecieron jugando juntos en el barrio: uno zurdo y el otro diestro, una dupla temible que soñaba con compartir una cancha profesional.
Pero el camino de Miguel estuvo lleno de esfuerzo. “Me tocó ser papá a los 15 años, de mi hijo Teo. Dejé el colegio para trabajar con mi viejo en la obra y hacer changas para llevar una moneda a casa”, recuerda el goleador, que también vistió las camisetas de Villa Azalaiz y General Paz Juniors.
A los 17 años estuvo cerca de sumarse a Talleres, pero el pase se frustró por cuestiones burocráticas. Luego tuvo una prueba en Instituto, cuando Lucas Bovaglio era entrenador.
Hoy, el fútbol le devuelve alegrías. Su hermano y toda la familia estuvieron el domingo en la cancha para verlo brillar con tres goles y llevarse la pelota.

El sueño sigue intacto
Miguel disfruta el presente en Amsurrbac, pero mantiene viva la ilusión de dar el salto al fútbol profesional y cumplir el sueño de jugar al lado de su hermano Damián.
“Es el sueño de los dos: jugar juntos en el fútbol grande. Ojalá algún día se nos dé”, dice Miguel, con una sonrisa que mezcla orgullo, humildad y esperanza.























