El equipo Alpine de Fórmula 1, estructura con la que competirá Franco Colapinto en el 2026, recibió una “gran noticia” de cara a la siguiente temporada.
Es que la escudería de Alpine superó con éxito los crash-test obligatorios de la FIA para sus monoplazas. Este resultado positivo de las pruebas generó entusiasmo de cara al próximo año, temporada en la que utilizarán motores Mercedes.
Steven Nielsen, director de la escudería francesa, expresó su satisfacción con el trabajo realizado: “Creo que hemos hecho todo lo que había que hacer”. Nielsen detalló que el nuevo chasis “ha superado los crash-test, es más ligero, más sólido, es bonito". No obstante, el director recordó que, si bien cada equipo dirá que su nuevo coche es bueno, lo que realmente marcará la diferencia es lo que suceda en la pista.
La superación de estas pruebas por parte de Alpine es particularmente significativa en el contexto de la nueva reglamentación de 2026, que exige una masa del coche notablemente reducida.

Cadillac también aprueba las pruebas
Alpine no es la única escudería que ha completado con éxito estas revisiones obligatorias. Cadillac, que se está preparando para convertirse en la décima escudería de la Fórmula 1 a partir de la temporada 2026, también superó los crash-test.
Graeme Lowdon, director de Cadillac, confirmó que sus monoplazas superaron las pruebas y explicó la dificultad inherente de la nueva normativa: “Si se analizan los desafíos de diseño de la nueva reglamentación, con una masa del coche notablemente reducida, estos crash-test se vuelven comparativamente más exigentes, ya que se apunta a un peso total más bajo del coche".
Lowdon subrayó que lograr superar estas pruebas es una etapa importante para cualquier equipo, pero lo es aún más para Cadillac, dado que no cuentan con “largos años de experiencia colectiva en el diseño de estos componentes”.


























