La ciudad de Jesús María fue escenario durante el fin de semana de la disputa de la segunda fecha del Campeonato Codasur y también la segunda del certamen Argentino de Rally, y hubo hechos que merecen un análisis profundo.
Al igual que los colores que distinguen a la bandera a cuadros, un símbolo del automovilismo, la fecha dejó hechos en blanco y negro.
Lo mejor del rally en Jesús María
Lo que quedó en blanco fue la expectativa que se generó. Es que la ciudad de la doma y el folklore se vio “invadida” por los distintos equipos que dispusieron, alrededor del recinto de la doma y por espacio de varias cuadras a la redonda, una escena que motivó el interés del público.
Otra postal muy particular fue ver cómo el campo de la doma se transformaba por horas en el Parque Cerrado de la prueba y quedaban allí depositados todos los autos, después de la partida en rampa y luego de la primera etapa de carrera.
Una espaciosa sala de prensa, un lugar para que las autoridades de la carrera pudieran hacer su seguimiento y una rampa de largada donde los aficionados desafiaron a la lluvia y el frío, el viernes por la noche, terminaron de conformar un espectáculo particular y que nunca en la historia del Rally Argentino había tenido a Jesús María como epicentro.
En lo estrictamente deportivo, los resultados alcanzados por los pilotos cordobeses no pudieron ser mejores. Más allá de las adversas condiciones climáticas, con lluvia, barro y frío en el fin de semana.
El paraguayo Fabrizio Zaldivar (Hyundai) rubricó en suelo cordobés su primera victoria. Lo hizo junto a su navegante cordobés, Marcelo Der Ohanessián. Venían de ganar el Rally de la Valdorcia en Italia, por el certamen peninsular de tierra.
Se sumaron los triunfos de Rubén Montoro-Pretto, en la Clase RCMR, del local Diego Grión-Pratto en la RC3, Alejandro Baratella en la RC4 y Pablo Alessandrini en la RC5.
Lo peor del rally en Jesús María
El color negro es para hacer referencia a lo ocurrido en carrera con la seguridad y el comportamiento de los aficionados.
Pasaron cinco años del último Rally Mundial en Córdoba y parece que fue un siglo. Ya que todo lo aprendido quedó en el olvido.
La organización dispuso para la carrera lugares específicos para los aficionados, a los cuales podían acceder hasta dos horas de la partida del primer auto en vehículo y de 30 minutos antes en forma peatonal.
Desde un primer momento, los aficionados se hicieron eco en las redes sociales de los pocos lugares dispuestos, como si con ello se buscara que muy pocos tuvieran acceso a ver al paso de la carrera.
Y manifestaron su descontento, señalando si de esta manera se pensaba que el Rally Mundial volvería al suelo cordobés…
Las críticas llegaron a los organizadores y a algunos poseedores de campos por los que pasaba la carrera, quienes se pusieron a disposición para abrir sus terrenos y permitir así la asistencia de más espectadores que se sumaran a las pocas zonas de espectadores.
El mal clima reinante y el poco tiempo para mejorar los lugares para el público se aunaron para que los espectadores incurrieran en actos de imprudencia al paso de la carrera.
Así, un “aficionado” de 38 años no tuvo mejor idea que bajar a la ruta de carrera y seguir el paso de un auto a escasos centímetros del mismo, para luego ser detenido por las autoridades policiales en el tramo La Pampa-Santa Catalina, que abría la carrera.
También por imprudencia y mala ubicación, donde faltaron las cintas demarcatorias, la rotura y la pérdida de la rueda delantera derecha del Citroën de Rodrigo Zeballos fue a impactar contra un aficionado y su hija, quienes terminaron golpeados por la cubierta.
Asimismo, fue notable la cantidad de vehículos mal ubicados al costado de la ruta, en paralelo con el paso de los autos de competición, y por un milagro no hubo despistes que originaran colisiones contra ellos y trajeran consecuencias para los pilotos.
Detalles para tener en cuenta, porque del 10 al 12 de mayo Villa Dolores vuelve a recibir al Rally Argentino por la tercera fecha y esperamos que, por el bien de todos, puedan ser corregidos por la organización y las autoridades pertinentes.
