“Fue épico, muy reconfortante; con gente capaz, experimentada y comprometida. El titánico esfuerzo de muchos tuvo su premio”. Así, con mucho orgullo, recordó la gesta cordobesa de un club del interior del país (el único) Pablo Bobadilla, el entonces presidente de La Tablada, campeón sudamericano de clubes de rugby, en Uruguay, el 4 de marzo de 2000.
Hace 25 años, el Azulgrana, campeón del Nacional de Clubes de rugby, derrotó a Carrasco Polo Club, el dueño del cetro uruguayo, por 39-21, y se quedó con el título en la segunda edición del Campeonato Sudamericano de Clubes (la Copa Libertadores del rugby). El partido se jugó en cancha del elenco oriental y el árbitro fue Pablo Deluca.
En semifinales, La Tablada había eliminado a Universitario de Paraguay por 79-7, mientras que los uruguayos hicieron lo propio ante Universidad Católica de Chile 51-3. Con el triunfo del elenco cordobés, Argentina retuvo la Copa que el año anterior había ganado San Cirano de Buenos Aires ante los uruguayos de Carrasco Polo.
El equipo cordobés estuvo integrado por Javier Moreno, Alejandro Canale, Juan Masjoan, José Soria, Carlos Ayala, Carlos Bini, Rodrigo Tejeiro, Iván Noviski, Arturo Trucco, Damián Muñoz Agustín Rodriguez Araya, Roberto Milani, Guillermo Bernardi, Daniel Rodríguez, Marcos Caldo, Cristian Villalba, Nicolás Canavosio, Germán Sagrera, Ramiro Pez, Diego Martínez, Francisco Leonelli, Emanuel Uranga, Esteban Roque y Juan Cruz Légora. Los entrenadores eran Alejandro Canale y Javier Moreno.

Marcelo Canale era el preparador físico; Luis López, médico; Carlos Légora, el mánager, y Rubén Gigli presidía la Comisión de Rugby.
“La copa tiene un valor aún no dimensionado. Eran los mejores equipos de Sudamérica. Aunque la superioridad del rugby es argentina, incluido Córdoba que, con gran parte de ese plantel, Los Dogos fueron campeones del Argentino por primera vez. El compartir con realidades y culturas rugbísticas diferentes contribuyeron al crecimiento de nuestro club”, contó Alejandro Canale, integrante de la dupla de entrenadores de aquel equipo, y remarcó que en “La Boutique” de Urca “el público explotaba”.
Javier Moreno era “la otra pata” de la dupla de entrenadores e indicó que ese logro histórico “se gestó desde el título de Campeón Nacional de Clubes, también único en Córdoba, del año anterior, junto con Alejandro Canale y Marcelo Canale, y con un equipo dirigencial con objetivos de excelencia”.
“Fue una actuación superlativa tanto en forwards como en tres cuartos. Jugando un rugby moderno y dinámico. Carrasco Polo formó con 11 jugadores de la selección nacional que unos meses antes había competido en el Mundial de Rugby”, agregó Moreno.

Los memoriosos recuerdan que fue un partidazo en Uruguay. La destacada actuación de los forwards y la excelencia en las formaciones fijas y el maul fueron claves para quedarse con el juego y el título. Carlos Bini era el capitán de ese equipo y no oculta el orgullo y el honor de haber asumido ese rol. “Un gran equipo que nos dio muchas satisfacciones; una linda época del club, con muchas cosas lindas e importantes que nos pasaron esos años”, recordó Bini.
Y agregó: “Nos mudamos de sede, salimos campeones del Nacional de Clubes, entre algunos momentos destacados. Hoy, con el deseo de volver a esas épocas de gloria, seguimos trabajando en pos de eso. Una linda época que quedará en la retina de los memoriosos”.
Como quedará el recuerdo de un hito deportivo como el de aquel equipo de La Tablada en 2000. “¡Hermoso grupo! ¡Excelentes personas y mejores jugadores! ¡Tuve el honor de ser parte de ese grupo de excelencia!”, concluyó Luis López, médico del plantel campeón sudamericano de clubes hace 25 años.

Arriba, de izquierda a derecha: Javier Moreno, Alejandro Canale, Juan Masjoan, José Soria, Carlos Ayala, Carlos Bini,Rodrigo Tejeiro, Iván Noviski, Arturo Trucco, Damián Muñoz, Agustín Rodriguez Araya, Roberto Milani, Guillermo Bernardi y Daniel Rodríguez.
Abajo: Marcos Caldo, Cristian Villalba, Nicolás Canavosio, Germán Sagrera, Ramiro Pez, Diego Martínez, Francisco Leonelli, Emanuel Uranga, Esteban Roque y Juan Cruz Légora.