Atrás quedó la primera fecha del Torneo de las Seis Naciones, y son muchas las sorpresas que dejó la principal competencia de rugby del continente europeo que congrega a las selecciones de Italia, Gales, Escocia, Irlanda, Francia e Inglaterra.
Empezando por Irlanda, el conjunto dirigido por Andy Farrell protagonizó un partidazo frente a Inglaterra y se terminó quedando con una victoria crucial por 27-22.
El encuentro, que se disputó en el estadio AVIVA, ubicado en Lansdowne Road, Dublin, no comenzó de la mejor manera para el local. Con un juego vertiginoso y frontal, y tras un quiebre de Ollie Lawrence, Henry Slade metió un rastrón y le sirvió el try al debutante Cadan Murley. Tras la conversión del apertura Marcus Smith, el partido se ponía 7-0 en favor de la visita a 10 minutos del inicio.
A casi 20 minutos del comienzo, la visita manejaba los hilos del partido. Tal así, que en el minuto 21, luego de un pase de Ollie Lawrence al wing Tommy Freeman, Inglaterra parecía que estaba a punto de marcar el segundo try. Pero no fue así. En esta ocasión, el número 13 de Irlanda, Bundee Aki, metió un tackle “francés” y salvó al local. El partido se mantenía 7-0 para los ingleses.
Aunque el Trébol también iba a responder. Con un jugador más (Marcus Smith se había ido amonestado en el minuto 25 del primer tiempo), James Lowe se sacó un tackle de encima, corrió por la banda izquierda, asistió a Jamison Gibson-Park y este sumó los primeros cinco para Irlanda. Como Sam Prendergaast falló la conversión, los locales se ponían a solo dos de la Rosa (7-5).
La primera etapa terminó con un penal anotado por Smith, por lo que el marcador cerró con un 10-5 parcial para la visita.
Pero el descanso le sentó bien a Irlanda, que afinó la puntería y salió a la cancha a llevarse el encuentro.
A tan solo 11 del comienzo del complemento, con un salteo, Sam Prendergaast asistió a Bundee Aki y este, a pura potencia, se sacó tres hombres de encima y anotó el segundo try para el local. Prendergaast volvió a fallar la conversión. Así, el duelo quedaba igualado en 10-10.
Inmediatamente, a dos minutos del último try, tras un penal polémico, el 10 del Trébol pidió palos, ajustó la mira y sumó tres puntos. Por primera vez en el partido, la casa se ponía arriba (13-10).
A pesar de que la Rosa buscó oxígeno en el banco de suplentes, no pudo frenar la inercia del local, que a los 24 del segundo tiempo volvió a sumar de a siete. En esta ocasión, la jugada comenzó cuando Gibson-Park levantó la pelota, corrió la base y asistió con un pase corto a James Lowe, quien, tras quebrar la línea de defensa, mantuvo derecha la carrera y habilitó al segunda línea Tadhg Beirne, que se zambulló en el ingoal. La conversión de Jack Crowley ponía el duelo 20-10 para los dirigidos por Farrell.
El Trébol seguía encendido. A solo nueve minutos de haber sumado el segundo try, Lowe recibió un pase en el carril izquierdo de la cancha, se quitó a Tommy Freeman de encima con un hand-off y le pasó la ovalada a Dan Sheenan, que se bancó dos tackles y marcó. Crowley volvió a convertir y estiró la diferencia a 17 puntos (27-10).
Cuando el partido parecía terminado, Inglaterra, con mucho amor propio, apretó los dientes y logró achicar el marcador en dos oportunidades. A los 36 del complemento, en manos de Tom Curry (Crowley no sumó), y a los 41, en la humanidad de Tommy Freeman (esta vez el apertura suplente si marcó la conversión), la Rosa redujo la diferencia y finalizó el partido apenas cinco puntos abajo (27-22).
En cuanto a los otros duelos, Francia goleó el viernes a Gales por 43-0 en Saint-Denis (Stade de France) y Escocia, en Murrayfield, se impuso a Italia por 31-19 en el primer turno del sábado.