Los tenistas argentinos dan que hablar en el Masters 1000 de Cincinnati, con triunfos importantes que significan mucho más que una simple clasificación a segunda ronda.
Por un lado, Sebastián Báez (43 del ranking ATP) logró un importante triunfo frente al belga David Goffin (64) por 6/1 y 6/3, en el último turno del día inaugural. El jugador nacido en San Martín, Buenos Aires, de 24 años, venía arrastrando una mala racha en torneos de esta categoría, con ocho derrotas consecutivas en torneos como Shanghái, París-Bercy, Indian Wells, Miami, Monte-Carlo, Madrid y Roma, además de una eliminación en segunda ronda en este mismo torneo el año pasado.
Este nuevo triunfo en suelo estadounidense —donde curiosamente había conseguido su último festejo de nivel Masters 1000— se dio tras una sólida actuación en la que Báez concretó cuatro quiebres, no cedió su saque y capitalizó los 40 errores no forzados de Goffin, ex número 7 del mundo. El partido, disputado en la cancha 3, duró una hora y 16 minutos y marcó el primer triunfo del argentino en cancha dura en lo que va de la temporada, más allá de sus únicas apariciones previas en Indian Wells y Miami, durante el llamado Sunshine Double.
Con esta victoria, el pupilo de Sebastián Gutiérrez, que suma 11 triunfos en torneos Masters 1000 y mantiene un récord de 15-16 en 2025, se enfrentará en segunda ronda al canadiense Gabriel Diallo (35°), quien recientemente eliminó a Francisco Cerúndolo en Roland Garros.
Por su parte, Tomás Etcheverry (60 del ranking ATP) protagonizó una remontada épica ante el chino Juncheng Shang (109) y se llevó el triunfo por 6/7 (5), 7/6 (4) y 6/4. El platense, que comenzó con un buen nivel y dispuso de un break point clave en el primer set, terminó cayendo en el tiebreak, lo que generó un bajón anímico del que le costó recuperarse. Shang llegó a estar 5-2 arriba en el segundo parcial, pero Etcheverry reaccionó, igualó el marcador y, tras una interrupción por lluvia, volvió más firme: se llevó el segundo tie break y cerró el partido con autoridad en el tercer set.
La victoria llega en un momento justo para el tenista de 26 años, que está momentáneamente bajo las órdenes de Javier Frana. En la próxima instancia, buscará seguir por la senda ganadora cuando enfrente al canadiense Félix Auger-Aliassime (28°), quien debutará en el torneo.
Otro que avanzó de ronda fue Camilo Ugo Carabelli (47), al vencer en sets corridos por7-5 y 6-3 al japonés Kei Nishikori.
El partido marcó el primer enfrentamiento entre ambos en el circuito profesional. Carabelli comenzó con autoridad, quebrando en el primer juego de devolución y tomando ventaja. Aunque Nishikori logró emparejar el marcador, el argentino encontró precisión en los momentos clave y cerró el primer set con un quiebre en el tramo final.
En la segunda manga, la paridad se mantuvo hasta el 3-3, pero Carabelli aceleró desde el fondo de la cancha, quebró en el séptimo juego y sostuvo su servicio con firmeza para sellar el triunfo. En poco más de una hora y media, el argentino confirmó su recuperación física y dio un paso firme en el certamen.
Su próximo rival será Ben Shelton, actual número 6 del ranking ATP y reciente campeón en Toronto.
El que no pudo sumarse a la jornada de triunfos albicelestes fue Thiago Tirante (135). El argentino perdió ante el italiano Luca Nardi por 6/4 y 7/6 (5), en un partido que duró casi dos horas y en el que llegó a estar 5-3 y con saque para llevar el segundo set.
Su próximo destino será el Challenger de Cancún, como preparación para el US Open.
Con estos tres triunfos, el tenis argentino pisa fuerte en Cincinnati y renueva sus esperanzas de meterse en las fases decisivas de uno de los torneos más prestigiosos del calendario.