El diseño de cocinas evolucionó hacia espacios más funcionales, estéticos y duraderos. Uno de los elementos clave en esa transformación son las mesadas: los materiales juegan un rol fundamental, tanto en el estilo como en el rendimiento diario.
Hoy, las tendencias se enfocan en superficies que combinan resistencia, fácil mantenimiento y estética sofisticada. Entre los materiales más destacados están los cuarzos, las superficies sintetizadas y los granitos naturales; sus características únicas se adaptan a diferentes estilos y necesidades.
“El cuarzo, uno de los favoritos, es una superficie compuesta por cuarzo natural mezclado con resinas, lo que le otorga gran resistencia a manchas, rayaduras y golpes. Al no ser poroso, es higiénico y fácil de limpiar. Está disponible en una amplia gama de colores y acabados. Otorgamos la posibilidad de acceder a ese material a un costo promocional desde $ 223.300 el metro lineal”, dijo Cristina Paredes, responsable de Ventas de Marmolería Pietra.
Las superficies sintetizadas como Dekton y Neolith también ganan protagonismo. Son materiales ultracompactos fabricados a partir de una mezcla de minerales naturales, sometidos a altas temperaturas y presiones. El plus que presentan es su resistencia extrema al calor, al rayado y a los rayos ultravioleta, lo que permite usarlos tanto en interiores como en exteriores. Así, son ideales para quienes buscan superficies de alto rendimiento y diseño contemporáneo.
El granito natural es un clásico que sigue vigente. Su bajo costo y durabilidad lo hacen accesible (el metro lineal, desde $ 71.500). Cada pieza es única en dibujo y color, lo que aporta un carácter especial a la cocina.
“Es muy resistente al calor y al uso diario, aunque requiere un sellado periódico para mantener su impermeabilidad y brillo”, agregó Paredes.
En la misma línea, Jorge Urizar, titular de SQL Amoblamientos, destacó: La cocina se convirtió en un espacio esencial de conexión entre familia y amigos. Ha dejado de ser sólo un lugar funcional para ser un punto de encuentro clave en la vida cotidiana del hogar. Su diseño evolucionó para cumplir con las necesidades de interacción y convivencia, manteniendo equilibrio entre estética y funcionalidad”.
Recursos
La incorporación de islas y barras permite disfrutar de momentos de reunión, ya sea para un desayuno, un aperitivo o para compartir un tiempo en familia mientras se cocina. Esa distribución abre un abanico de posibilidades para quienes buscan crear espacios dinámicos.
Los diseños son personalizables, ajustándose a las necesidades y gustos del propietario tanto como a la visión y creatividad del arquitecto e interiorista. La variedad de materiales y acabados disponibles permite generar soluciones prácticas que responden a la estética contemporánea. En este marco, se apuesta a combinar superficies lisas en tonos claros, acabados mate y maderas que aportan calidez.
La integración de materiales genera un ambiente acogedor, sofisticado y equilibrado, que conjuga lo mejor de la funcionalidad y el diseño. Se utilizan opciones de primera calidad como melaminas, lacados y placas de alta tecnología provenientes de Italia y Alemania, que incorporan nanotecnología.
Esas placas no sólo destacan por su diseño, sino también por su resistencia y durabilidad.
“Ofrecemos acabados en alto brillo, como el metacrilato, y en súper mate, ambos fáciles de mantener y altamente resistentes a los usos diarios”, agregó Urizar.
Los precios de los proyectos de cocina de SQL Amoblamientos varían según especificaciones y detalles. El costo por metro lineal se encuentra en un rango de $ 200 mil a $ 400 mil, dependiendo de la cantidad de cajones, herrajes y complejidad del diseño.

Los empotrables
Los electrodomésticos empotrables son claves para lograr espacios funcionales, seguros y visualmente integrados. En hornos, lo más elegidos son los eléctricos de 60 centímetros de ancho por su cocción homogénea, control de temperatura preciso, múltiples funciones como Air Fryer, grill, convección y facilidad de instalación respecto a los de gas.
“Predominan los diseños puros y minimalistas, pero también los hay con detalles de acero inoxidable. Otra opción son los hornos de 90 cm de ancho, los cuales poseen un 50% más de capacidad; son ideales para familias numerosas”, apuntó Nicolás Soriano, responsable de Marketing de Ormay.

En el rubro de los anafes, los tradicionales a gas siguen siendo muy usados, por su respuesta inmediata al calor y bajo costo operativo. Los anafes eléctricos vitrocerámicos se destacan por su elegancia, facilidad para limpiar (al ser vidrio), controles touch y zonas de cocción independientes con diferentes potencias.
“Por otro lado, los anafes de inducción son cada vez más populares y elegidos por su rapidez, eficiencia energética y mayor seguridad. Utilizan una tecnología que transmite el calor directamente a la base de la olla, sin calentar el vidrio del producto”, concluyó Soriano.

Campanas de extracción
Las campanas de acero inoxidable convencionales siguen en auge, por su capacidad de extracción y valor a la hora de completar la estética de las cocinas. Un producto que tomó mucho protagonismo son las campanas telescópicas o extensibles: ideales para cocinas integradas o minimalistas, ocupan menos espacio visual.
“Contamos con el modelo Flex C604, que es retráctil”, subrayó Soriano.
Las campanas de Ormay poseen un sistema de recirculación con filtros de carbón activado, lo que permite su instalación sin salida exterior (apto para departamentos).

Precios de referencia
Hornos empotrables eléctricos, dependiendo de su capacidad y prestaciones: entre $ 550 mil y $ 2 millones
Anafes a gas: entre $ 180 mil y $ 700 mil
Anafes eléctricos (vitrocerámicos e inducción): entre $ 350 mil y $ 700 mil
Campanas de extracción: entre $ 300 mil y $ 600 mil