La Reversión del Gasoducto Norte es una obra de Ingeniería Civil que se proyectó principalmente para sustituir el fluido proveniente de Bolivia con gas nacional extraído de la formación Vaca Muerta en Neuquén y así abastecer al centro y norte del país Córdoba, Salta, Jujuy, Santiago del Estero, Catamarca, La Rioja y Tucumán).
El gasoducto Norte tenía una orientación desde el norte hacia el sur, ya que transportaba gas de los propios yacimientos del noroeste, que hoy están prácticamente agotados, y con gas que se importa de Bolivia, cuyos yacimientos también se están agotando. La reversión incluye tres grandes etapas.
La primera etapa, que se materializa plenamente en nuestra provincia, contempla la ejecución de una importante obra civil que es un Gasoducto de Interconexión de 36″ de diámetro y 122,8 kilómetros de recorrido, entre la Planta de Compresión de La Carlota, ubicada sobre el Gasoducto Centro y la Planta de Compresión de Tío Pujio, ubicada sobre el Gasoducto Norte. De esta forma, este nuevo gasoducto funcionará como puente entre los dos previamente existentes. Esta etapa concretó hitos importantes y críticos, como el cruce del Río Tercero y la Autopista Nacional Nº9.
La segunda etapa consistió en la construcción de una nueva cañería de 30″ de diámetro paralela a la del Gasoducto Norte, específicamente entre las Plantas Compresoras “Tío Pujio” y “Ferreyra” por un total de 62 kilómetros. Esto se debe a que el Gasoducto Norte fue diseñado como un gasoducto “telescópico”, o sea que su diámetro se iba reduciendo a medida que iba descargando su gas en las distintas ciudades y localidades, siendo su mayor diámetro en el origen Salta y menor al llegar a San Jerónimo (Santa Fe). La construcción de la cañería paralela permitirá, de esta forma, que se pueda incrementar su capacidad de transporte.
La tercera etapa consiste en realizar adecuaciones en las plantas compresoras “La Carlota”, “Tío Pujio”, “Ferreyra”, “Dean Funes”, “Lavalle” y “Lumbreras”, para que puedan revertir el flujo y la inyección del gas a lo largo de los gasoductos. Se prevé que esta etapa culminará totalmente en 2025.
Obra clave
Para la provincia de Córdoba es una obra de suma importancia, dado que permitirá abastecer de manera segura y económica con gas de Vaca Muerta a la red de gasoductos de distribución provincial y así llegar a todas las ciudades y localidades de Córdoba.
La reversión del Gasoducto Norte junto con el gasoducto de Vaca Muerta, al que le falta el segundo tramo desde Salliqueló (provincia de Buenos Aires) a San Jerónimo (Santa Fe), representan las dos obras que no sólo permiten superar el cuello de botella en el transporte de gas, sino que posibilitan la puesta en producción y la baja de costos en todo el sistema.
La obra fue realizada por la Unión Transitoria de Empresas (UTE), conformada por Techint y Sacde, luego de ganar la licitación de la reversión del Gasoducto Norte y es supervisada por la empresa estatal Energía Argentina Sociedad Anónima (Enarsa).
Los fondos provienen casi en su totalidad de un préstamo otorgado por la Corporación Andina de Fomento (CAF) por un total de U$S 540 millones. El préstamo tiene un plazo de quince 15 años, incluyendo un período de gracia de 54 meses. Una vez finalizada, permitirá revertir el sentido del flujo de gas, logrando transportar hasta 19 millones de metros cúbicos.
Cifras relevantes
El precio promedio del gas natural proveniente de Bolivia era en julio pasado de U$S 11,98, mientras que el proveniente de Argentina descendía a U$S 3,80, es decir que este cambio permitirá el ahorro de divisas por U$S mil millones al año. Los usuarios residenciales e industriales se beneficiarán, porque el costo promedio del gas y de generación eléctrica bajarán y eso debería reflejarse en tarifas. Además, el Estado Nacional afrontará menos subsidios y facilitará el ajuste de las cuentas. Por último y no menos importante, mejoran la seguridad de abastecimiento energético y la competitividad de la economía.
