El año 2021 fue atípico, complejo y cargado de desafíos. La llegada de la pandemia por Covid-19 enfrentó a todos a una realidad que nadie esperaba. Junto con la tragedia de los fallecimientos y la caída de muchos sectores de la economía, el aislamiento expuso las condiciones precarias en las que la mayoría de los colegios profesionales de la provincia realizan sus tareas, como control del ejercicio de sus matriculados, la visación y registración de tareas profesionales y el asesoramiento a profesionales y la ciudadanía, entre otras actividades inherentes a su naturaleza.
Si 2020 fue terrible a la vez que novedoso, 2021 demostró que la pandemia tiene una duración mayor a la que se suponía en un principio y que, en consecuencia, las acciones deben orientarse a transformar creativamente las formas de trabajo. Hoy quedó demostrado que, con o sin pandemia, las formas remotas de atención y tramitación se imponen, por su practicidad y por su eficacia.
En el caso de los agrimensores y agrimensoras, una parte de la tarea profesional demanda de la presencia física, ya que la constatación y determinación de límites no puede hacerse sin conocer el territorio de primera mano. Pero para las demás tareas, la virtualidad ha mostrado sobradamente su éxito.
Adaptaciones institucionales
Desde el 20 de marzo de 2020, el Colegio de Agrimensores de la Provincia de Córdoba (CA) continuó trabajando sin cesar ni un solo día. El proceso de digitalización que permitió mantener el rendimiento durante la pandemia es el producto de un proceso de transformación que lleva años en la institución. Con orgullo, se puede decir que es la única institución de su tipo en el país que cuenta con un sistema cien por ciento digital para la gestión de trámites y expedientes.
Con idas y venidas, aperturas y cierres, signados por la suba y baja de contagios, el conjunto que profesionales representados en la entidad pudo realizar sus tareas de campo en mejores condiciones que el año pasado. Con las nuevas tecnologías disponibles para realizar los relevamientos, los agrimensores pueden garantizar la realización de su trabajo de campo resguardando al mismo tiempo su salud y la de la ciudadanía en general.
Esto se vio reforzado, además, por la incorporación de sistemas de visación digital de expedientes en la mayoría de las oficinas públicas que intervienen trabajos de agrimensura. Si bien es cierto que en muchos casos esto no redundó en una reducción de los tiempos de gestión, sí permitió agilizar la presentación de trabajos. Para los casos en los cuales la tramitación continuó desarrollándose de manera presencial, el CA puso a disposición de los profesionales un servicio de cadetería gratuito. Esto facilitó la tramitación de quienes forman parte de los grupos de riesgo y/o que residen en el interior provincial.
En ese sentido, y en pos de seguir adaptando la institución a los tiempos que corren, el Colegio de Agrimensores aprobó su nuevo reglamento electoral que, en adelante, permitirá celebrar comicios, aunque el contexto sanitario impida hacerlo de manera presencial. Si fuera necesario, y habida cuenta que la pandemia aún no ha concluido, la elección de autoridades podrá llevarse a cabo por medios remotos de votación. Esto es algo que no estaba previsto en la normativa interna pero que hoy se adapta a la nueva configuración del mundo.
Avances en muchos frentes
El Colegio de Agrimensores volvió a implementar el sistema de asesoramiento gratuito a la ciudadanía, por medio de plataformas de videollamada que facilitan el encuentro y la visualización de documentos (relativos a las consultas), a la vez que garantizan el cuidado sanitario.
Quienes necesiten recibir asesoramiento de un profesional podrán solicitarlo por correo electrónico a info@agrimcba.org.ar y un representante se podrá en contacto para pautar un día y horario conveniente.
Por otra parte, en el marco del trabajo conjunto realizado con el Estado provincial, la entidad volvió a suscribir un convenio con el Ministerio de Justicia y Derechos Humanos para la realización de las tareas de regularización dominial que lleva adelante la Unidad Ejecutora para el Saneamiento de Títulos. Esto permitirá arrimar soluciones a muchas familias que aún no poseen el título de propiedad de su vivienda.
Además, el trabajo remoto de todo el equipo habilitó la posibilidad de llevar a cabo pequeña refacciones y adaptaciones en el edificio de la sede para mejorar las posibilidades de atención y las condiciones de encuentro cuando el contexto sanitario así lo permita.
Salud y prosperidad
A lo largo de este año quedó demostrado que cuando los diversos agentes (públicos y privados) trabajan en conjunto, los objetivos se vuelven más cercanos y realizables. Por eso, para obtener los mejores resultados, siempre se debe poner el bien común por encima de cualquier otro elemento.
Desde el Colegio de Agrimensores saludan, en este fin de año, a todas las oficinas públicas, sus autoridades y su personal, a toda la ciudadanía y muy especialmente a todos los profesionales de la agrimensura, enviando los mejores deseos y esperando que 2021 sea un año de prosperidad, encuentro y felicidad para toda la sociedad cordobesa.
