En la era de la información, en la que los consumidores son bombardeados con mensajes publicitarios a cada instante, la creatividad se convierte en el elemento vital que permite a las marcas destacarse y generar conexiones auténticas con su audiencia.
Cada 4 de diciembre se celebra el Día de la Publicidad, porque un día como hoy en 1936 se llevó a cabo en Buenos Aires el Congreso de Publicidad, con el objetivo de promocionar la enseñanza de la materia en Argentina. A raíz de la efeméride, repasamos qué piensan los principales exponentes de Córdoba sobre esta profesión y cuáles son los principales desafíos que enfrentan en la era actual.
Matías Quiñonero, director de Comunicaciones Estratégicas del Club Atlético Talleres, recuerda la esencia inmutable de esta profesión: “Conectamos marcas con personas. Ahí estamos parados nosotros y eso no cambia”.
Sin embargo, el camino para lograrlo ha experimentado una transformación radical en los últimos años.
Franco Berardo, socio fundador de HelloBrand y presidente de la Asociación Cordobesa de Agencias de Publicidad, describe al publicista actual como un “multidimensional, con conocimientos que van más allá de los mensajes”.
Ya no basta con la creatividad, insiste. El publicista actual debe dominar un amplio espectro de disciplinas que incluyen la producción audiovisual, el diseño gráfico, la psicología, la sociología y la investigación. “La curiosidad es fundamental, así como la audacia para pensar diferente y la capacidad de adaptarse a las nuevas tecnologías”, agrega Berardo.
Mariano Saracco, director de las agencias 25 Watts y Romero Victorica, lo sintetiza con una frase contundente: “Hoy ser publicista es reinventarse cada seis meses”. La irrupción de la tecnología y de la digitalización, asegura, han transformado el panorama publicitario, obligando a los profesionales a adaptarse a un ritmo acelerado.
“El publicista debe comprender las necesidades de los consumidores, interpretar tendencias culturales y sociales, y utilizar las herramientas tecnológicas y relaciones para transmitir mensajes relevantes, impactantes y éticos”, afirman por su parte María Cozzi, directora de Operaciones y Constanza Cubas, directora creativa, ambas de Agencia Late.
La creatividad: el alma de la publicidad en la era digital
En un mundo dominado por algoritmos y datos, la creatividad se convierte en el factor diferenciador. “Ser creativo siempre será la salvación porque todo en la vida merece una idea”, afirma Matías Quiñonero. La tecnología y los datos son herramientas poderosas, pero sin la chispa creativa, los mensajes publicitarios se vuelven fríos y repetitivos, advierte.
Desde Late aseguran que la tecnología y los datos son herramientas poderosas, pero la creatividad es el puente que hace que la publicidad deje de ser sólo información para convertirse en inspiración y acción. En este contexto, la creatividad adopta un nuevo rol: ser la chispa que humaniza lo digital. Es lo que convierte una campaña basada en algoritmos en una experiencia memorable, que resuena más allá de las métricas.
Por su parte, Mariano Saracco destaca el poder de la creatividad para romper con los patrones establecidos por los datos: “La tecnología homogeneiza, mientras que la creatividad personaliza; los datos son fríos y la creatividad los enciende”. La creatividad permite generar conexiones genuinas con la audiencia, trascendiendo la mera segmentación y el análisis de datos.
Franco Berardo argumenta que esa inventiva se vuelve aún más crucial para destacarse. Además, señala que la creatividad en la publicidad actual no se limita sólo al mensaje, sino que se extiende al uso de los medios, las herramientas digitales y la producción.
Más allá del consumo: la publicidad como motor de cambio
La publicidad no se limita a vender productos, tiene el poder de influir en la cultura, desafiar paradigmas y crear conexiones significativas. Saracco cree firmemente en su poder transformador: “La publicidad no sólo vende productos, sino que moldea culturas, desafía paradigmas y crea conexiones”.
Para lograr ese impacto, los anuncios y mensajes deben evolucionar constantemente, anticipándose a las tendencias sociales, tecnológicas y éticas. Berardo subraya la importancia de aprovechar la tecnología: “Las herramientas digitales permiten obtener información en tiempo real, personalizar los mensajes y medir los resultados, lo que aumenta la eficiencia y la capacidad de transformación”.
Un mensaje para las nuevas generaciones de publicistas
En este día especial, Matías alienta a las nuevas generaciones a no dejar de crear: “Sigan haciendo. Experimenten conectando la marca más cercana con su audiencia. Esta es una profesión empírica, se aprende haciendo. Tengan sus marcos conceptuales, escuchen, lean consejos si quieren (como este mismo), pero sobre todo experimenten”.
Franco, por su parte, aconseja: “Sean curiosos: investiguen, no se conformen con la primera idea, exploren nuevas herramientas y amen la tecnología”. Y anima también a ampliar sus horizontes: “Generen experiencias, viajen, tengan contacto con diferentes realidades y amplíen sus perspectivas”. Y, sobre todo, a ser audaces: “Anímense. La publicidad es un oficio con mucha historia y mucho futuro, pero requiere audacia y capacidad de adaptación”.
Mariano deja una frase que resume su visión para las nuevas generaciones: “La publicidad será transformadora si se convierte en un puente entre las marcas y un propósito mayor. A las nuevas generaciones que eligen esta profesión, les digo: ser publicista hoy es ser un agente de cambio, un arquitecto de ideas que impactan el mundo”.
María y Constanza invitan a atreverse a soñar en grande, a desafiar límites y a ser voces de cambio. Porque, como ellas mismas indican, más allá de las marcas, trabajamos para las personas. Y cuando hacemos las cosas bien, podemos hacer la diferencia. “¡Crean en ustedes y en lo que pueden lograr! El futuro de la publicidad está en sus manos”, cierran.
Cuál es el trabajo de un publicista
El publicista es un profesional multifacético que se encarga de conectar marcas con personas. Para lograrlo, debe dominar un amplio espectro de disciplinas que van desde la creatividad y la producción audiovisual hasta la psicología, la sociología y la investigación.
En la era digital, el publicista debe estar en constante reinvención, adaptándose a las nuevas tecnologías y a las cambiantes necesidades del consumidor. Su labor consiste en crear mensajes que resuenen en la audiencia, utilizando la creatividad para destacarse en un mundo saturado de información.
El publicista no sólo vende productos, sino que también moldea culturas, desafía paradigmas y crea conexiones significativas. Su trabajo tiene el potencial de ser una herramienta de cambio positivo al abordar problemáticas globales como la sostenibilidad, la inclusión y la justicia social.
En un mundo en constante cambio, los publicistas tienen la responsabilidad de utilizar su creatividad y sus habilidades para construir marcas con propósito, generar conexiones auténticas y contribuir a un futuro mejor. ¡Feliz día a todos los publicistas que se atreven a desafiar los límites y a crear un impacto positivo en el mundo!