La muerte del aclamado director de cine Rob Reiner y su esposa, Michele Singer Reiner, conmocionó a Hollywood, mientras la investigación policial avanza con la detención y acusación formal de su hijo. El suceso, reportado como un doble homicidio, tuvo un giro personal cuando la exprimera dama de los Estados Unidos, Michelle Obama, reveló que ella y su esposo, Barack Obama, tenían una cita pendiente con la pareja la misma noche en que fueron encontrados sin vida.
Michelle Obama, quien describió a los Reiner como “algunas de las personas más decentes y valientes que puedas conocer”, compartió la noticia durante una aparición en Jimmy Kimmel Live el lunes 15 de diciembre. “Los conocíamos desde hace muchos, muchos años, y se suponía que íbamos a verlos esa noche -anoche,” dijo la exprimera dama, añadiendo: “Íbamos a verlos esa noche… y entonces llegó la noticia”.
Detalles de la investigación y el arresto
Rob Reiner, de 78 años, director de clásicos como When Harry Met Sally y The Princess Bride, y Michele Singer Reiner, de 70, fueron hallados muertos el domingo por la tarde en su residencia de Brentwood, Los Ángeles. El Departamento de Policía de Los Ángeles (LAPD) acudió al lugar entre las 3:30 y 3:40 p. m. tras una llamada de asistencia médica, y ambos fueron declarados muertos con heridas de arma blanca.
Horas después, alrededor de las 9.15 del domingo, la policía arrestó a Nick Reiner, de 32 años, hijo del matrimonio. Nick Reiner, quien habló públicamente en el pasado sobre sus problemas de adicción e inestabilidad, permanece detenido sin derecho a fianza bajo sospecha de asesinato. Las autoridades presentarán el caso este martes ante la Fiscalía del Condado de Los Ángeles.
Diversas fuentes indicaron a la prensa estadounidense que la línea de tiempo de los investigadores incluye un fuerte y ruidoso altercado entre Rob Reiner y su hijo Nick ocurrido la noche previa a los decesos, durante una fiesta navideña organizada por el comediante Conan O’Brien.
Defensa frente al ataque político
Durante su entrevista, Michelle Obama también defendió enfáticamente el legado de Rob Reiner, respondiendo indirectamente a un mensaje publicado por el presidente Donald Trump en Truth Social. Trump había calificado al cineasta de “trastornado”, atribuyendo su muerte a diferencias políticas que denominó “Síndrome de trastorno de Trump”.
La exprimera dama condenó la apatía con la que el mandatario se refirió a la tragedia. “Permítanme decir esto: a diferencia de otros, Rob y Michele Reiner son algunas de las personas más decentes y valientes que puedas conocer”, afirmó. Ella destacó que la pareja eran personas apasionadas dispuestas a actuar por lo que les importaba, preocupadas por su familia, el país, la justicia y la equidad.
Mientras continúan los homenajes públicos, incluyendo flores en la estrella de Rob Reiner en el Paseo de la Fama, figuras de la industria lamentaron su pérdida. El comediante Jerry Seinfeld reconoció el papel fundamental de Reiner en el nacimiento de su serie, escribiendo que su programa “nunca habría sucedido sin él”.

























