Este domingo se celebran los premios Oscar, Demi Moore se posiciona como una de las grandes favoritas para llevarse la codiciada estatuilla a Mejor Actriz. Su carrera, marcada por altos y bajos, se extendió por más de cuatro décadas, y aunque sus logros no siempre fueron reconocidos por la industria, este año está más cerca que nunca de alcanzar el reconocimiento definitivo.
La historia de Demi Moore en Hollywood comenzó en la década de los 80, cuando la actriz comenzó a ganar visibilidad con pequeños papeles en series y películas. Su primer trabajo en el cine fue en 1981, pero fue en 1990 cuando alcanzó la fama mundial gracias a su papel en Ghost: La Sombra del Amor.
En esta película, interpretó a Molly Jensen, una joven cuya vida se ve marcada por la muerte de su novio, interpretado por Patrick Swayze, quien la protege desde el más allá. La película fue un éxito rotundo, aclamada por la crítica y nominada a varios Premios Oscar, pero el reconocimiento que tanto esperaba Moore no llegó. A pesar de ser considerada una de las grandes estrellas de la década, su nombre no apareció entre los nominados, mientras que Whoopi Goldberg se alzó con el Oscar a Mejor Actriz de Reparto por su papel en el mismo filme.
La crisis de los 90 y los premios “anti-Oscar”
A pesar del éxito inicial, los años 90 no fueron fáciles para Moore. A principios de la década, protagonizó Propuesta Indecente, una película que recibió duras críticas y varios premios “anti-Oscar”. A mediados de los 90, la actriz se encontraba entre las más pagadas de Hollywood, pero las decisiones sobre los papeles que eligió en ese entonces fueron fuertemente criticadas. En 1996, su participación en Striptease le valió el primer reconocimiento de su carrera, aunque no fue el que esperaba: el Golden Raspberry a la peor actriz de reparto.
Este golpe, sumado a las crecientes críticas, llevó a Moore a alejarse temporalmente de la industria en 1997. Decidió centrarse en su familia, criando a sus tres hijas, Rumer, Tallulah y Scout Willis, mientras las ofertas de trabajo comenzaron a escasear. Su estatus de estrella se vio opacado, pero la vida de Demi no terminaría ahí.
El Renacer de Demi Moore: “La Sustancia”
Fue en 2022 cuando Demi Moore regresó a la pantalla con La Sustancia, una película dirigida por Coralie Fargeat. En este filme, Moore interpreta a una mujer que enfrenta la presión estética de la industria cinematográfica y el miedo a envejecer, una temática que resonaba profundamente con su propia experiencia. La Sustancia fue un éxito rotundo en el Festival de Cannes, donde recibió una ovación de 11 minutos, lo que le permitió entrar en la temporada de premios con fuerza.
La película fue nominada a los Golden Globes, Bafta, los Independent Spirit Awards, los premios del Sindicato de Actores (SAG), y a los Critics Choice Awards, entre otros. Con cada trofeo, las posibilidades de que Moore lograra su primer Oscar aumentaban.
Su primer premio, un Golden Globe
En los Golden Globes, Demi Moore vivió un momento histórico: a los 62 años, y después de más de 45 años de carrera, recibió su primer galardón importante como actriz. Al recibir el premio, la emoción fue evidente. En un emotivo discurso, agradeció por el reconocimiento, recordando cómo un productor le había dicho años atrás que nunca sería reconocida por su trabajo, a pesar de ser una de las grandes estrellas comerciales de la industria. “Hace 30 años, un productor me dijo que era una ‘actriz de palomitas’, y pensé que eso significaba que nunca me iban a reconocer”, recordó entre lágrimas.
Moore destacó la importancia de seguir adelante a pesar de las críticas y de la inseguridad, y cerró su discurso con un poderoso mensaje: “Hoy celebro esto como una prueba de mi totalidad, del amor que me mueve, y del regalo que es hacer algo que amas”.
Una racha de éxitos y la gran candidatura al Oscar
Tras este histórico primer premio, Moore continuó recogiendo galardones. En los Critics Choice Awards, ganó nuevamente como Mejor Actriz, y su discurso volvió a emocionar a los presentes, destacando lo imprevisible de su carrera. Sin embargo, la carrera hacia los Oscar no fue sencilla. En los Bafta y los Independent Spirit Awards, la joven Mikey Madison, protagonista de Anora, le arrebató el premio.
Pero el 23 de febrero, en los Premios del Sindicato de Actores (SAG Awards), Demi Moore logró su tercera victoria en un mes, superando a Madison en una reñida competencia. Este triunfo la coloca como una de las grandes favoritas para el premio a Mejor Actriz en los Oscar, consolidando su regreso a la cima.
