En medio del furor por el musical de La Sirenita, Albana Fuentes, protagonista de la versión teatral del clásico de Disney, se refirió al éxito de las reversiones y al impacto emocional que generan.
En una charla íntima con La Voz del Interior, explicó por qué estas propuestas conmueven tanto al público, especialmente a los adultos: “Siento que hay una necesidad de recordar momentos de felicidad que nos interpelan mucho”.
Desde su mirada, el auge de los remakes no es casual. Más allá de lo visual y tecnológico, existe un factor emocional poderoso que se activa cada vez que un clásico vuelve al escenario o a la pantalla.
“Está pasando con todo. Margarita es una hermosa serie original, que a mí me encanta. A Mora (Bianchi) la quiero mucho, pero es la continuación de Floricienta. Y sí, hay algo de eso que a los grandes nos hace ver Margarita, más allá de que a las niñas les guste”, expresó.
La nostalgia como motor del éxito
Albana, que se declara fan de los clásicos de Disney, ve con claridad cómo el componente nostálgico atraviesa a distintas generaciones.
“Todos los live action que trae Disney rompen taquilla porque todos queremos volver a vivir esos momentos. Aladdín, La Bella y la Bestia, El Rey León... incluso Mufasa, que es una película original, pero es El Rey León. Hay algo nuestro de la nostalgia que está con ganas de vivirse”, explicó.
Para ella, el fenómeno va más allá de una simple reedición. Implica una revisión crítica del pasado y de los mensajes que antes se aceptaban sin cuestionamientos.
“Siento que también hay una pelea interna entre ‘Uy, pero yo quería ver el clásico’, pero a la vez el clásico ya no me gusta. El choque es muy fuerte”, dijo, y agregó: “A lo mejor, después de un tiempo, cuando se vuelva a ver, se vea con otros ojos”.
Lejos de resistirse al cambio, Albana celebra este proceso de resignificación. “Soy la primera en ir a ver todas las reversiones”, confesó entre risas.
Y cerró: “Más que nada me quiero quedar con esto de la nostalgia. Hay algo de nuestro niño interno que quiere y necesita volver a vivir esas cosas. Por eso convoca tanto un título como La Sirenita”.
