Pedro Alfonso y Paula Chaves encontraron, ya hace mucho tiempo, una fórmula para su felicidad familiar cada verano. No es secreta ni mucho menos: se trata de hacer temporada en Villa Carlos Paz con comedias que respetan su sello, mientras se instalan por tres meses a vivir en Córdoba, con un mix de trabajo y disfrutar de las sierras y ríos.
“Sólo un año que no vinimos por la pandemia, y fue durísimo. Nuestros hijos, todas las navidades y todos los años nuevos de su vida los vivieron acá. Lo que me gusta de Córdoba es que siempre todos los años conocemos un lugar nuevo. Al principio es como que somos rutinarios estando en el teatro, después nos vamos acomodando y empezamos a pasear todos los días para todos lados”, dice Pedro desde su camarín en el Teatro del Lago. Paula revela que Atos Pampa, Los Reartes y La Paisanita son algunos de sus lugares favoritos.
Los dos hicieron una pausa en uno de los últimos repasos de la obra Un viaje en el tiempo, que anoche tenía previsto su estreno. Además de la pareja estelar, integran el elenco Pachu Peña, Noelia Marzol, Viviana Saccone y Sebastián Almada.
La obra tiene una estética ochentosa que ya de por sí transporta al pasado y busca un efecto cómico en partes iguales. “Recién justo veíamos en la entrada de este teatro que acá en 1986, la época donde yo viajo, estaba Susana Giménez haciendo La Mujer del Año. Y después yo investigué y también Olmedo hizo temporada acá. Yo llego a una discoteca, y nos encontramos con muchas cosas. La historia nos cuenta la comedia que nos gusta hacer, el vodevil, las puertas, los enredos, pero ambientada en esa época”, adelanta Pedro, sin ánimo de espoilear nada.
Paula, que interpreta a una mesera que anda en patines, agrega: “Las puestas, la dirección y todo está enfocado en poder trasladarnos bien al ‘86. Y hay algo que sucede, que empiezan a tocar los acordes de la música y te pasa algo, es increíble”.
Pedro, futbolero empedernido, acota que el año elegido fue el ‘86 porque hay un gancho también con algo del Mundial de México. “De hecho, vamos a ver en un pedacito un partido, Argentina-Inglaterra, justamente. No voy a espoliar mucho, pasa algo sobre el final que es muy divertido. Yo soy muy nostálgico, sobre todo de los ‘90: sigo a muchas páginas de Instagram con las publicidades o las golosinas que ya no existen o todo eso. Yo en el 87 tenía 8 años, así que también está la idea que algún día entre mi hijo, que tiene 8 años, hagamos como ‘yo con yo’”.
–En el afiche tenés puesto un chaleco que linkea con Marty McFly.
–Sí, tiene un guiño pero la obra tiene muy poco de la película, yo no soy tan fanático de Volver al futuro, entonces por ahí yo tiraba una idea y me decían ‘No, pero eso es muy parecido a la película!’, y yo me quería matar. Si hacés de un extraterrestre como hicimos, de hecho, te lleva a E.T. De hecho, ahora en Netflix, yo buscaba a ver qué había, y ahora hay un montón de películas nuevas de este año, que son de viajes en el tiempo.
–¿Por qué eligieron a Diego Ramos como director, siendo que él supo ser su compañero?
–Paula: Estuvo con nosotros en Locos por Luisa, y la verdad que pegamos buena onda, conoce muy bien el estilo y el género que hace Pepe hace tantos años. Esto de la comedia familiar, tener el respeto por el público para que pueda venir a disfrutar toda la familia, que los chistes sean bien pensados para que los chistes de adultos, los niños no los entiendan. Eso se cuida mucho para que se pueda divertir toda la familia, pero que vos no te incomodes porque Pachu se mandó un chiste y tenés a tu hijito al lado. Esta cosa de las carcajadas a destiempo es de lo más lindo de la obra para mí, que pasa todos los años, cuando los chicos se ríen en una parte y los adultos se ríen en otra.
–Vos Pedro con Pachu ya jugás de memoria, se ha convertido en tu partenaire ideal.
–Hoy nos retó un poco Diego porque no parábamos de reírnos. Nos miramos y nos reímos. Nos entendemos mucho, ahora tratamos de ser precisos en lo que tenemos que hacer y después nos vamos soltando y vamos tirando cosas nuevas. Más allá del comediante y lo que la gente lo quiere, es importante el gran compañero que es.
–Paula: Y la gente lo ama, todas las generaciones. Los jóvenes, los más grandes, las mujeres mueren porque está hecho un potro con 62 años.
–Pedro: Cuando hacíamos gira e íbamos a comer a un restaurante, llama mucho la atención y es insoportable la situación que se genera, porque tenés el otro costado, por la confianza que genera y cómo la gente se le tira encima. Pero él lo maneja bien.
–Paula: Nuestra hija más chica, Filippa, lo ama y no consumió nada de todo lo que hizo Pachu. Viene corriendo y le da un abrazo y Pachu siempre les trae un regalito, un sticker, un caramelito y ellos lo aman.
–¿Sus hijos ya no les piden pista ya? ¿No quieren actuar en la obra?
–Paula: ¡No entienden por qué no están en la marquesina!
– Pedro. Ellos se copan y se divierten y a mí me gusta hacer eso: si ellos se divierten, va, si no, nada forzado. Cuando vienen se quieren subir a saludar en el final. Oli está muy copada con el baile en Buenos Aires. Y en casa todo el tiempo hacen obras y para nosotros es un planazo porque les lleva por ahí tres horas armarlo y se entretienen. Hacen los vestuarios, editan todo el playlist de canciones y hacen más un musical.
–Paula: Hicieron Margarita, Floricienta, Descendientes, ahora están con Matilda, pero siempre cierran con el tema del momento que nos hayan hecho Los Caligaris para el cierre en las comedias. Al haberse criado acá en el teatro con nosotros es parte de su vida, no conocen otra cosa, más allá de que eso también les apasiona.
Brasil, streaming, series y más
Siempre pasa algo en este país, eso lo sabemos todos. Ahora, el “cuco” de la temporada turística local es Brasil, que con sus precios competitivos amenaza llevarse un aluvión de turistas argentinos.
Pedro y Paula, sin embargo, confían en sus expectativas y en que nunca les fue mal haciendo temporada acá. “Yo no me meto mucho en el tema económico, no porque no me interese, porque estoy acá con la música, el guión y todo. Siento que va a ser una gran temporada. Ayer terminamos muy tarde y fuimos a comer, y la vi explotada de gente a Carlos Paz. Muy lindo, el lago está hermoso. Siempre está que la gente se pueda ir a Brasil, pero por ahí eso le pelea más a la costa que a este lugar. El río es algo diferente y… iba a decir muy nuestro, pero no me voy a tomar el atrevimiento”.
–Paula: Yo siento que siempre en Carlos Paz sucede algo, como que está todo mágicamente perfecto, no sé si porque nosotros siempre la pasamos tan bien y los chicos mueren por venir acá, pero todos nos vamos con una sensación tan linda que pase lo que pase, puede cambiar el presidente, puede estar barato un país limítrofe, lo que sea, nosotros sentimos que todo va a estar bien. Ojalá que a todos nos pueda ir bien. Siempre hay buena vibra acá. Está como angelado Carlos Paz.
–Les cambio de tema. Atravesamos un cambio de paradigma, una transición entre la tele y el streaming. Ustedes creo que son uno de los últimos “productos” que surgieron de aquella vieja tele que medía 40 puntos de audiencia, algo que ahora parece de otro mundo. ¿Qué análisis hacen?
–Pedro: Es como una transición, pero también me parece que va a dar la vuelta a la tele, no es que va a seguir cayendo, sino que se le va a encontrar una vuelta. Yo estoy convencido de eso. En España, por ejemplo, hay programas muy populares como El Hormiguero o La Resistencia. Acá yo creo que se van a encontrar esos programas para la tele porque va a seguir siendo masiva, más allá de que los streaming sigan creciendo, porque la llegada que tiene la tele, que es de más fácil acceso, el streaming está lejos de tenerla. Hay muchas cosas que también se pueden seguir haciendo en la tele.
–Ahora, ¿qué hace falta? ¿Plata para tener presupuesto o ideas?
–Ideas. Programas se hacen, se han hecho. El año pasado hubo unos programas que por ahí no les fue tan bien y había mucho presupuesto. Hay que encontrar el gancho para que la gente quiera ver ese programa en vivo. Creo que pueden convivir las dos cosas, televisión y streaming, y se pueden nutrir.
–Vos Paula estás encarando un proyecto en streaming el año próximo en Olga.
–Este año se me dio esto del streaming, me motiva también poder hacer algo nuevo con otras generaciones que tal vez no me conozcan. Me es un desafío para mí entrar a un lugar donde no estoy canchera como puede ser si me das para conducir un programa de entretenimientos.
–¿Vos Pedro el año que viene vas a volver al streaming de Bondi?
–Yo en Bondi no sé, tendremos una charla más adelante. Sí voy a hacer en Olga un programa una vez a la semana de Deportes con Gastón Edul y, a confirmarse, el Pollo Álvarez. Me encanta, es algo que quiero hacer hace mucho, porque me gusta todo el deporte.
–Otra cosa que te gusta son Los Piojos, que hasta te invitaron a subir al escenario a uno de los shows en La Plata.
–Increíble. Ayer pensaba... ‘bueno, ahora es sufrir otra despedida, ¡no estoy preparado’. Yo fui a 3 de los shows y Pau a 2. Y los 3 a campo. Podría haber ido a platea, me ofrecieron hasta palco y me pagaban de un banco para que fuera, pero yo quería ir a campo para revivir mies viejas épocas que íbamos con mis amigos a todo el país.
–Por último Paula, ¿qué sentiste al ver a tu hermana Delfina en su actuación en la serie de Máxima? ¿Te gustaría a vos hacer alguna ficción así?
–Delfi es un orgullo enorme, ahora está en Buenos Aires y capaz que en enero viene acá a Carlos Paz a vernos. Es impresionante todo lo que logró, todo lo que estudió, siento que viví todo su proceso, es la primera que materné. Verla todos los años que estudió, todas las veces que le cerraron las puertas, los castings que le decían que no y volvía llorando y verla ahora interpretando un papel como el de Máxima, viviendo en Holanda, grabando en Brujas, o que se va a New York, todo en inglés y ahora en holandés con una peluca y un lente de contacto 14 horas por día... es una genia. Aparte me hice fanática de la serie, me olvido que es mi hermana estoy totalmente sumergida en la historia. Me queda la asignatura pendiente que alguna vez me la daré porque me encantaría poder hacer una serie.
Para ver
Un viaje en el tiempo, en el Teatro del Lago. Con Pedro Alfonso, Paula Chaves, Noelia Marzol, Pachu Peña, Viviana Saccone y Sebastián Almada. A las 21.30. Tickets en Edenentradas.com.ar entre $ 20.000 y $ 25.000.
